El G7 ha condenado este domingo la intrusión de Rusia en Ucrania y ha suspendido su participación en la próxima reunión del grupo en Sochi prevista para junio según han anunciado la Casa Blanca en un comunicado.
"Nosotros, los líderes de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos, el Presidente del Consejo Europeo y el presidente de la Comisión Europea, nos unimos hoy para condenar la clara violación de la Federación de Rusia de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania", han afirmado en el comunicado difundido por la Casa Blanca.
"Hemos decidido, suspender por el momento nuestra participación en las actividades relacionadas con la preparación de la Cumbre del G8 prevista en Sochi en junio ", ha expresado grupo.
Previamente, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, advirtió que Rusia podría perder su asiento en la mesa del G-8 (EE.UU., Canadá, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia más Rusia).
El boicot a la cumbre se mantendrá activa según han anunciado "hasta que la situación vuelva a su cauce y el G8 pueda tener una discusión con sentido".
"Nos comprometemos a apoyar a Ucrania en sus esfuerzos por restaurar la unidad, la estabilidad y el bienestar político y económico del país", afirman los dirigentes del G7.
El grupo ha instado a Rusia a mantener conversaciones con Ucrania, directamente o con participación internacional. Del mismo modo, han expresado su apoyo a Ucrania en las conversaciones de las nuevas autoridades con el Fondo Monetario Internacional encaminadas a negociar un nuevo programa de asistencia y a poner en marcha las reformas necesarias en la economía del país.
La OTAN pide a Rusia que se retire
Por otro lado, el secretario general de la OTAN, el danés Anders Fogh Rasmussen, ha pedido a Rusia que respete la integridad territorial de Ucrania y retire sus tropas del país, tras mantener una reunión de urgencia de casi ocho horas.
"Condenamos la escalada militar rusa", ha afirmado Rasmussen en conferencia de prensa, al tiempo que ha considerado que la incursión militar en la península de Crimea "viola las normas internacionales", y ha pedido a Moscú a retirar sus tropas.
Los representantes permanentes de la OTAN han tenido un encuentro en el seno del Consejo del Atlántico Norte, la más alta autoridad de la OTAN, y luego se han reunido con el embajador ucraniano, Ihor Dolhov, en el marco de la Comisión OTAN-Ucrania y a petición de Kiev.
Kerry: es un "acto descarado de agresión"
Por su parte, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, ha asegurado que la ocupación militar rusa de Crimea es un "acto descarado de agresión" y "una acción del siglo XIX en el siglo XXI". Y advertió antes de conocerse la decisión de las potencias de que si Rusia quería continuar siendo miembro del G8 debía comportarse como tal.
"Es una violación de la ley internacional y una violación de la Carta de las Naciones Unidas", ha sostenido Kerry. "Es una acción del siglo XIX que pone en duda la capacidad de Rusia para vivir en el mundo moderno", ha reiterado.
Kerry, quien ha mantenido conversaciones con aliados de EE.UU. en torno a la crisis en Ucrania, ha comparecido en los programas dominicales de noticias de la televisión estadounidense y ha reiterado la disposición de Washington a cooperar con Rusia en una solución diplomática de la crisis de Ucrania.
Muy firme en sus advertencias a Moscú
No obstante, ha sido muy firme en sus calificativos de la acción rusa y en sus advertencias a Moscú.
"Si Rusia quiere seguir siendo miembro del G8 debe comportarse como un miembro del G8", aseguró el responsable estadounidense. Asimismo, adelantó que Washington consideraba el boicot a la cumbre de esa entidad, programada para junio en la ciudad rusa de Sochi.
Kerry advirtió de que una extensión de la acción militar rusa estaría preñada de peligros para Rusia. "El pueblo ucraniano sabe pelear", apuntó.
Por otro lado, Kerry viajará a Kiev el próximo martes para expresar el apoyo estadounidense a las autoridades ucranianas ante la intervención militar rusa, según ha anunciado el Departamento de Estado.
Obama y sus aliados expresan su "grave preocupación"
El presidente Barack Obama y los líderes de Gran Bretaña, Alemania y Polonia han expresado este domingo su "grave preocupación " por la intrusión de Rusia en Ucrania, a la que han calificado como una violación del derecho internacional y una amenaza para la paz y la seguridad internacionales.
Según ha asegurado la Casa Blanca en un comunicado, Obama ha mantenido con cada líder una llamada telefónica separada y se ha comprometido con la canciller alemana, Angela Merkel, el primer ministro británico, David Cameron, y con el presidente polaco, Bronislaw Komorowski a trabajar juntos en un paquete de ayuda a Ucrania para ayudar a estabilizar su economía.
Los cuatro líderes han enfatizado su apoyo a Ucrania y sus esfuerzos para celebrar elecciones en mayo, del mismo modo que se han comprometido a trabajar juntos en un paquete de ayuda financiera para ayudar a el país a estabilizar su economía. "Los dirigentes han hecho hincapié en que el diálogo entre Ucrania y Rusia debe comenzar de inmediato, con la ayuda internacional según el caso" ha indicado el comunicado.
Cameron también advierte a Putin
El primer ministro británico, David Cameron también ha advertido al presidente Vladimir Putin que Rusia pagaría costes significativos a menos que el Kremlin cambie de rumbo en Ucrania.
Según ha asegurado el portavoz del líder inglés, Cameron ha coincidido con el presidente de EE.UU., Barack Obama en que las acciones de Rusia en Ucrania son completamente inaceptables.
"Estuvieron de acuerdo en que las acciones de Rusia son completamente inaceptables" El portavoz también ha recalcado que ambos mandatarios han coincidido en la necesidad urgente del país en eliminar la escalada de violencia y en que Rusia debe "entablar un diálogo directo con Ucrania".