La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha alertado de que si EE.UU. no aumenta el 17 de octubre el techo de su endeudamiento, habría un impacto negativo en la economía mundial.
“Es una misión crítica que esto se resuelva lo antes posible“
"El cierre parcial de la Administración es suficientemente malo, pero el fracaso a la hora de elevar el techo de deuda sería mucho peor, y podría dañar seriamente no solo la economía estadounidense, sino toda la economía global", ha dicho Lagarde en una conferencia en la Universidad George Washington.
"Es una misión crítica que esto se resuelva lo antes posible", ha subrayado la directora gerente del FMI.
Por otra parte, el Departamento del Tesoro de EE.UU. ha advertido en un informe de los "efectos catastróficos" de una suspensión de pagos si no se eleva el techo de la deuda, y ha dicho que esa situación podría llevar a Estados Unidos a una crisis económica "igual o peor" que la de 2008.
Tercer día de cierre parcial de la Administración
La Administración de EE.UU. cumple su tercer día de cierre parcial después de que el Congreso fuera incapaz de alcanzar un acuerdo sobre un nuevo presupuesto, lo que ha provocado la paralización de numerosos servicios públicos y la suspensión de empleo de centenares de miles de funcionarios federales.
Se espera que la incertidumbre en torno a esta crisis fiscal se mantenga dado que en apenas dos semanas el Tesoro ha anunciado que alcanzará el techo de su deuda federal, de 16,7 billones de dólares, lo que amenaza con situar al país al borde de la suspensión de pagos.
En la misma conferencia, Lagarde ha señalado que la normalización de la política monetaria en la primera economía mundial, que ha aplicado un agresivo plan de estímulo monetario, debe ser gestionada "muy cuidadosamente".
"Dado que esta normalización afecta a tantos mercados y gente en todo el mundo, EE.UU. tiene una responsabilidad especial: aplicarla de manera ordenada, vinculada al ritmo de la recuperación y empleo, y comunicada claramente", ha dicho la directora del Fondo.
El discurso de Lagarde se produce una semana antes de que el FMI dé a conocer sus nuevos pronósticos de crecimiento global en el marco de la reunión anual del organismo y el Banco Mundial que se celebrará en Washington entre el 8 y el 12 de octubre.