La Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos ha anunciado que mantendrá intacto su programa de compras de activos por 85.000 millones de dólares mensuales, hasta que haya más "evidencias" de que la situación de la economía ha mejorado, sorprendiendo de esta manera a los inversores, que esperaban una reducción de los estímulos monetarios.
Así, al cierre de sesión, dos de los principales índices de Wall Street, el Dow Jones de Industriales y el S&P 500 han marcado sus máximos históricos, tras subir un 0,95% y un 1,22%, respectivamente. El Dow ha cerrado en 15.676,90 puntos y el S&P en 1.725,52.
"Teniendo en cuenta el grado de ajuste fiscal, el Comité ve una mejora de las condiciones de la actividad económica y del mercado laboral desde que inició su programa de compra de activos hace un año en consonancia con la creciente fortaleza subyacente de la economía en general", explica la Fed en un comunicado.
Sin embargo, añade que el Comité ha decidido esperar a que haya "más evidencias de que este progreso es sostenido" antes de iniciar el ajuste en el ritmo de sus compras de deuda.
Bernanke: "Lo que vamos a hacer es lo adecuado para la economía"
Por su parte, el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, ha dicho que el inicio de la retirada del programa de estímulo monetario "podría darse más adelante" durante el año y ha advertido de que no se puede permitir que las expectativas del mercado dicten las acciones de esa institución.
"Lo que vamos a hacer es lo adecuado para la economía. No podemos dejar que las expectativas de los mercados dicten nuestras acciones" de política monetaria, ha afirmado Bernanke en rueda de prensa. Al tiempo que ha añadido que "hemos sido demasiado optimistas sobre las perspectivas de crecimiento".
Por otro lado, la Fed ha mantenido una vez más los tipos de interés en un rango objetivo de entre el 0% y el 0,25%, y ha vuelto a garantizar unos tipos en niveles "excepcionalmente bajos" al menos hasta que la tasa de paro continúe por encima del 6,5% y mientras las expectativas de inflación a uno o dos años no superen el 2,5%.
La decisión de mantener la política monetaria ha contado con el voto a favor de todos los miembros del comité a excepción de Esther L. George (Fed de Kansas), quien ha mostrado su preocupación ante la posibilidad de que el elevado grado acomodaticio de la política monetaria incremente los riesgos de futuros desequilibrios económicos y financieros y, con el tiempo, provoque un incremento de las perspectivas de inflación a largo plazo.
Rebaja las previsiones de crecimiento
La Fed ha revisado a la baja sus expectativas de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) tanto para 2013 como para 2014, pero ha mejorado ligeramente sus previsiones en torno al mercado laboral en ambos años.
De este modo, el escenario central de la Reserva Federal contempla un crecimiento del PIB de entre el 2% y el 2,3% en 2013, frente a una expansión de entre 2,3% y el 2,6% de junio pasado.
Asimismo, de cara a 2014 ha rebajado sus previsiones desde el rango del 3%-3,5% anterior al 2,9%-3,1%, mientras que para 2015 espera un incremento de la actividad de entre el 3% y el 3,5%, en comparación con el rango de entre el 2,9% y el 3,6% de junio.
Por su parte, la inflación concluirá este año entre un 1,1% y un 1,2%, algo por encima de las previsiones de junio en las que calculó entre un 0,8% y 1,2%. En 2014, el índice de precios será de entre un 1,3% y un 1,8%, por debajo del 1,4% y el 2% calculado previamente.
Mejora las expectativas de paro
A pesar de este empeoramiento de las previsiones de crecimiento, la Fed ha revisado ligeramente al alza sus expectativas de recuperación en el mercado laboral, lo que permitiría cerrar 2013 con una tasa de paro de entre el 7,1% y el 7,3%, frente al entre a la horquilla del 7,2% y 7,3% previsto hace tres meses.
En 2014, el desempleo en EE.UU. continuaría con su senda descendente hasta situarse entre el 6,4% y el 6,8%, por debajo del anterior rango de entre el 6,5% y el 6,8%, mientras que en 2015 oscilaría entre el 5,9% y el 6,2%, ligeramente por encima del rango de entre el 5,8% y el 6,2% de la anterior previsión, según las nuevas estimaciones de la Fed.
Por otro lado, catorce de los 19 miembros del comité consideraron que los tipos de interés deben permanecer en su actual nivel "excepcionalmente bajo" al menos hasta 2015. En concreto, tres de los participantes en el encuentro vieron necesario subir los tipos en 2014, mientras que doce defendieron un incremento de la tasa rectora en 2015. Los otros dos miembros del Comité consideraron que la primera subida debería ser en 2016.
Según las proyecciones publicadas por la Reserva Federal, 16 de los 19 miembros del comité creen que los tipos no deben superar o igualar el 1% al cierre de 2014. En el largo plazo, la gran mayoría de los participantes en el encuentro de la Fed vuelve a defender que los tipos deben situarse entre el 4% y el 4,5%.