Guillermo Fariñas, Berta Soler y otros reconocidos disidentes cubanos se han reunido por primera vez en Miami, la capital de la oposición en Estados Unidos, adonde han llegado tras la liberalización de los viajes decretada por el régimen castrista.
Los disidentes han hecho un llamamiento a la comunidad exiliada para que trabajen "por la libertad del pueblo de Cuba" desde el exterior.
Estados Unidos mantiene desde hace décadas un férreo embargo al gobierno comunista de la isla y este reprime sistemáticamente a la disidencia acusándoles de estar al servicio de ese país.
"Desde aquí hago un pedido a los jóvenes cubanos, incluso a quienes no hablen español, a que se comprometan en la reconstrucción de Cuba", ha reclamado Fariñas en su primera conferencia de prensa en Miami (Florida), que ha coincidido con la celebración este lunes del Día de la Independencia de Cuba, informa Efe.
Fariñas es un periodista que ha protagonizado prolongadas huelgas de hambre por la causa de los presos de conciencia que había en la isla hasta 2011, cuando fueron liberados los últimos.
El Gobierno cubano flexibilizó los viajes
Tras décadas de restricciones y complicados trámites, el Gobierno cubano flexibilizó a comienzos de este 2013 los viajes y desde entonces los más conocidos disidentes han emprendido diversas giras internacionales para denunciar "la dictadura" de Cuba..
Después de su paso por Europa, la actual líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, también ha participado en el acto organizado por el Miami Dade College (MDC) y la Fundación por los Derechos Humanos en Cuba en la Torre de la Libertad, todo un icono del éxodo cubano en Miami.
En esta torre se procesó la documentación de miles de cubanos que huían del triunfo de la revolución de Fidel Castro en 1959 y se les autorizaba a entrar en este país, para convertirse, a ojos del régimen cubano, en desertores.
Soler también ha pedido "a los jóvenes de Cuba que se queden para ayudar en la transición", y se ha mostrado a favor del embargo que Estados Unidos mantiene sobre la isla, siempre según la misma agencia.
Entre los asistentes a este acto estaba también el matrimonio Gloria y Emilio Estefan, dos de las caras cubanas más conocidas en EE.UU., así como otros destacados opositores que viven habitualmente en Cuba o en el exilio.