La crisis económica ha acelerado la brecha salarial entre ricos y pobres en los países de la OCDE: en los primeros tres años de la crisis la diferencia de ingresos ha crecido más de lo que lo había hecho en los 12 años anteriores.
Esta es la conclusión del informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico publicado este miércoles, según el cual, en 2010, el 10% de los más ricos ganaba 9,5 veces más que el 10% de los más pobres, como media de los 33 países miembros de la OCDE en los que hay datos.
La diferencia es mayor a la media en Chile, México, Turquía, EE.UU. e Israel, mientras que la menor brecha se da en Islandia, Eslovenia, Noruega y Dinamarca.
El informe muestra también un aumento de la pobreza en la mayoría de los países analizados, donde el Estado del bienestar ha servido de colchón hasta ahora, pero advierte que "con un mayor recorte del gasto social en los países de la OCDE se corre el riesgo de causar más desigualdad y pobreza en los próximos años".
España, entre los países con mayor aumento de la pobreza infantil
La media de pobreza subió en la población infantil de la OCDE, al pasar de un 13% en 2007 hasta un 14% en 2010. De los 16 países en los que aumentó la pobreza infantil, España fue uno de los que registró un mayor incremento (más de dos puntos porcentuales), junto a Bélgica, Eslovenia, Hungría y Turquía.
Al mismo tiempo, se observó un crecimiento de la pobreza entre los jóvenes (la media de la OCDE pasó de 12% al 14% en esos tres años), mientras que disminuyó el porcentaje de mayores de 65 años considerados pobres (bajó desde el 15% al 12%).
Ante este panorama, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, pide que se pongan en marcha políticas que impulsen el empleo y el crecimiento "para asegurar justicia, eficiencia e inclusión". "Entre esas políticas, es esencial la reforma de los sistemas tributarios para garantizar que todos pagan la parte que le corresponde en justicia y que también se benefician y reciben la ayuda que necesitan", ha concretado.