La crispación en Francia está aumentando notablemente en la antesala de la votación definitiva del proyecto que legaliza el matrimonio homosexual en la Asamblea Nacional, a cuyo presidente han enviado una carta con pólvora, lo que se suma a otras amenazas de muerte así como a varias agresiones homófobas registradas en las últimas fechas.
La misiva, mecanografiada, fue analizada por los servicios de seguridad de la Asamblea antes de llegar a Claude Bartolone, según la emisora pública France Info. En la misma se le advertía de las "consecuencias" de someter a voto la legalización del matrimonio homosexual, lo que está previsto para este mismo martes.
La carta con pólvora estaba firmada por el grupo “Interacción de Fuerzas Armadas (IFO)” y acaba con otra amenaza: "Nuestros métodos son más radicales y expeditivos que las manifestaciones. Habéis querido la guerra y la vais a tener".
La Fiscalía de París ha abierto una investigación sobre este hecho. El ministro del Interior ya denunció hace unos días que varios parlamentarios habían recibido amenazas de muerte.
Aunque no hay ninguna información sobre el grupo que ha firmado la carta, el discurso encaja con el expuesto días atrás por el cabecilla de la organización ultraderechista Juventudes Nacionalistas, Alexandre Gabriac, excluido en 2011 del Frente Nacional, tercera fuerza del país por número de votos.
Manifestaciones y agresiones
Esta última amenaza se produce en vísperas del voto definitivo de la ley que autoriza el matrimonio homosexual y un día después de la tercera gran manifestación en París contra este proyecto que reunió a 45.000 personas, según la policía, o 270.000, según los convocantes.
En días previos también se registró un aumento de las agresiones homófobas, según alertó la propia policía, informa Europa Press. Por ejemplo, el ataque a un bar gay de Lille el miércoles pasado.
El ministro del Interior, Manuel Valls, ha denunciado que las manifestaciones contra el matrimonio homosexual están "liberando el discurso homófobo". El ministro del Partido Socialista reconoció que las manifestaciones contra el matrimonio homosexual reúnen a mucha gente, pero ha dicho que "son una minoría comparada con los millones de franceses que votaron por François Hollande", que prometió legalizar el matrimonio homosexual en su campaña electoral el año pasado.
La norma ya ha sido aprobada en el Senado, donde el Gobierno tiene una mayoría mucho menos amplia de la que goza en la cámara baja.