El grupo turístico Orizonia, en preconcurso de acreedores, ha presentado un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ante la Dirección General de Empleo del Ministerio de Empleo y Seguridad Social que afecta a toda la plantilla: 2.329 trabajadores.
Tras las conversaciones mantenidas con los sindicatos, el grupo ha informado de que su prioridad ha sido conservar "el mayor número de puestos de trabajo" y que a partir de este momento se abre el periodo de consultas con los representantes de los trabajadores.
Los 2.329 empleados son los que figuran a día de hoy en la plantilla de Orizonia después del acuerdo firmado con Barceló, que absorberá 900 trabajadores con la compra de 157 agencias de viaje Vibo y la filial portuguesa de la aerolínea Orbest.
Otros 700 empleos han sido asumidos por Globalia al hacerse cargo de Luabay, la división hotelera del grupo, mientras que alrededor de 300 contratos temporales se han extinguido y también ha habido "numerosas" bajas voluntarias, que han sido absorbidas por otras empresas del sector, indicaron fuentes sindicales.
Según informa la compañía en un comunicado, "el objeto de este Expediente y del momento elegido a instancias de la compañía y de los agentes sociales para su presentación es facilitar la rápida tramitación de todos los procedimientos legales".
En última instancia, lo que se pretende es que "se alcance una resolución que facilite a los trabajadores afectados un acceso más ágil y rápido a las prestaciones que les correspondan", según la compañía.
El ERE antes que el concurso de acreedores
Ahora abre un período de consultas con los representantes de los trabajadores en el Grupo Orizonia, tal y como marca la ley. Fuentes sindicales han explicado a Europa Press (antes de conocerse la cifra de despidos) que la idea es negociar el ERE a lo largo del mes de marzo, a fin de que en este tiempo el juzgado pueda admitir la declaración del concurso de acreedores.
Así, apuntaron que es "factible" que durante la primera quincena de abril estén resueltos los contratos, de forma que los trabajadores afectados podrían acceder a las prestaciones por desempleo.
Además, matizaron que el inicio del ERE antes que el concurso de acreedores es una "buena opción", ya que podrían facilitar los documentos requeridos por el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) sin necesidad de que los trabajadores tengan que demandar independientemente.