La economía francesa se estancó en el primer trimestre, después de un año 2011 en el que su Producto Interior Bruto (PIB) creció un 1,7%, según los primeros resultados de las cuentas nacionales publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INSEE).
Esa evolución nula entre enero y marzo se produjo tras una ligera progresión del PIB del 0,1% en los tres últimos meses del pasado año, precisa el INSEE, que ha revisado a la baja en una décima sus cifras para el período entre octubre y diciembre.
El Gobierno saliente había previsto una subida del PIB del 0,7% en el conjunto de 2012, una cifra que ha retomado el presidente electo, François Hollande, para los cálculos de su programa electoral. La Comisión Europea, sin embargo, redujo esas expectativas y considera que el PIB no subirá este año más que un 0,5%.
Precisamente, Hollande ha basado su campaña electoral en reclamar un cambio de orientación en las políticas europeas, que relaje la austeridad estricta impuesta desde Alemania para dejar paso a medidas destinadas a revitalizar el crecimiento en unos países europeos que empiezan a ver pararse los motores de sus economías.
Las exportaciones se ralentizan
En los tres primeros meses del actual ejercicio, la demanda interna contribuyó al PIB con una décima, frente a las tres que había aportado en el cuarto trimestre de 2011. Dentro de ese indicador, el consumo subió solo un 0,2% y la formación de capital bruto retrocedió un 0,8%.
La producción de bienes y servicios registró un avance del 0,1%, una décima menos que entre octubre y noviembre.
El saldo exterior tuvo una contribución negativa de 0,1% del PIB, cuando en el último trimestre del pasado año había supuesto siete décimas positivas. La razón es que las importaciones volvieron a progresar (+0,7% tras -1,4%), mientras que las exportaciones ralentizaron su marcha (+0,3% en lugar de +1,1%).
La conformación de existencias por parte de las empresas reportó una décima al PIB entre enero y marzo, cuando entre octubre y diciembre había restado un punto.
El Banco de Francia, en sus previsiones presentadas el pasado día 10, aventuró que la economía francesa volverá a estancarse en el segundo trimestre.