El PBF
El Presupuesto de Beneficios Fiscales (PBF) cifra la disminución de ingresos tributarios que se producirá a lo largo del año como consecuencia de la existencia de incentivos fiscales orientados a lograr objetivos de política económica y social.
Los beneficios fiscales se reducen este año un 5,6% respecto a 2011, según los presupuestos del Estado. El importe estimado es de 38.102,70 millones de euros, 2.260,27 millones menos que en el ejercicio anterior.
El Estado solo cuantifica en el Presupuesto de Beneficios Fiscales lo que le cuestan las deducciones fiscales, no cifra el aumento de ingresos que se puede producir por las subidas impositivas como la ya realizada en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
Las bonificaciones en el IRPF disminuyen en 1.528,40 millones, un 9,2%. La caída se explica porque disminuye el número previsto de declarantes y el importe de las rentas salariales. Las deducciones por invertir en vivienda habitual caen el 13,4%. También bajan la deducción por maternidad un 12,6% y por alquiler de vivienda habitual un 16,8%.
En el impuesto de sociedades, los beneficios fiscales se reducen un 1,7% por la caída de las bases imponibles de las pymes y las sociedades de inversión mobiliaria que tributan a tipos reducidos. Sin embargo, aumentan los beneficios fiscales por la libertad de amortización al haberse eliminado la condición de crear o mantener empleo.
Menos incentivos en el IVA
Los incentivos en el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) bajan un 4,3%. Este moderado descenso se explica porque se prevé una menor demanda interna. Las bonificaciones por productos gravados al 8% (algunos alimentos, servicios de transporte y restauración, etc) bajan el 21% mientras que se disparan un 73,5% los beneficios fiscales de los bienes gravados al 4%, al incluirse la prórroga de este tipo superreducido del IVA a la entrega de viviendas nuevas hasta fin de año.
Las deducciones en los Impuestos Especiales caen un 1,5% como resultado del recorte del tipo de devolución del Impuesto de Hidrocarburos aplicado a la compra de gasóleo por los transportistas.
Las tasas suben, en general, un 1%, salvo las que se hayan creado o actualizado específicamente por normas dictadas en 2011. Se mantienen las tasas portuarias y la tasa general de operadores, cuyo importe es el 1 por mil de los ingresos brutos de explotación.