El Gobierno de Irán ha rechazado la acusación hecha por Estados Unidos de que está tras un complot desmantelado para asesinar al embajador de Arabia Saudí en Washington, según ha manifestado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Ramin Mehmanparast.
Mehmanparast, en declaraciones difundidas por la agencia oficial IRNA, ha calificado de "falsa" la acusación de EEUU de que las autoridades iraníes estuvieran detrás de una trama que pretendía atentar contra las legaciones de Israel y Arabia Saudí, y asesinar al embajador de este último país en Washington, Adel al Jubeir.
Irán y Arabia Saudí, ha asegurado, "mantienen unas relaciones de respeto mutuo y esas falsas afirmaciones no tendrán efecto alguno en la opinión pública de esta zona (de Oriente Medio)".
Para el portavoz iraní, la trama denunciada por EEUU es un "guión prefabricado" y "sin fundamento". Además, Mehmanparast ha condenado "ese tipo de actos terroristas", pero ha indicado que las acusaciones que se les hacen "son un truco ya gastado propio de la vieja y hostil política de EEUU y el régimen sionista (israel)" contra Irán.
"Los diseñadores de estas falsas situaciones pretenden promover la separación y ayudar al régimen sionista a salir de su actual aislamiento", ha apuntado el portavoz iraní, quien las ha considerado "un espectáculo cómico para crear situaciones especiales con intención de sembrar la discordia".
Gran Bretaña y EE.UU. estudian nuevas sanciones
Gran Bretaña está realizando consultas con Estados Unidos y otros países para imponer más sanciones a Irán tras las acusaciones de EE.UU. de un complot de dos hombres vinculados a los organismos de seguridad de Irán para asesinar al embajador saudí en Estados Unidos.
"Estamos consultando con Estados Unidos sobre las nuevas medidas", ha dicho un portavoz del primer ministro británico David Cameron, que ha afirmado que Gran Bretaña estácelebrando consultas con otros países sobre nuevas sanciones contra Irán.
La Unión Europea también ha amenazado con "serias consecuencias" si se demuestra que los acusados querían perpetrar los atentados. Así lo ha advertido este miércoles a jefa de la diplomacia de la UE, Catherine Aston.
Los hechos
Estados Unidos acusó ayer martes a Irán de estar tras un complot desmantelado para atentar contra las embajadas de Arabia Saudí e Israel en Washington, así como asesinar al embajador Al Jubeir.
El secretario de Justicia de EEUU, Eric Holder, ha explicado en rueda de prensa conjunta con el director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), Robert Muller, que el Gobierno iraní habría pagado un millón y medio de dólares a dos hombres para que perpetraran los atentados.
Los dos presuntos conspiradores fueron identificados como Manssor Arbabsiar y Gholam Shakuri, ambos de nacionalidad iraní, aunque el primero había obtenido también la estadounidense y residía en Nueva York, donde fue detenido el pasado 29 de septiembre en el aeropuerto John F. Kennedy.
Arbabsiar y Shakuri han sido acusados de conspiración para asesinar a un funcionario extranjero, conspiración para el uso de armas de destrucción masiva y conspiración para cometer un acto de terrorismo internacional, entre otros cargos.