Jornada negra para las Bolsas europeas -con caídas por encima del 2%- y para las primas de riesgo de los países periféricos de la zona euro y de Italia. Precisamente las dudas sobre el sector financiero de Italia han sido uno de los motivos por los que el diferencial entre el bono nacional a diez años y el alemán del mismo plazo se ha situado en los 335 puntos básicos al cierre de la sesión, su nivel más alto desde la creación del euro en 199.
En la jornada del lunes, el diferencial español ha sufrido su peor día del año al incrementarse en 50 puntos básicos -el viernes cerró en los 285- y el Ibex-35 ha registrado la segunda mayor caída del año.
Detrás de esta presión a la deuda soberana española están, además de las dudas sobre Italia, las dificultades para cerrar el segundo rescate a Grecia; y el hundimiento de la rentabilidad del bono alemán hasta el 2,672% -frente al 2,83%-, al ser valor refugio para los inversores.
Todo ello ha llevado a que la rentabilidad de los bonos españoles a diez años supere el 6%, récord desde 1997. En concreto, la tasa ha cerrado en el 6,030% frente al 5,675% del viernes.
Estas tensiones también se han trasladado a todas las Bolsas europeas, que han caído con mucha fuerza. Pocos minutos antes del cierre han suavizado muy levemente esas pérdidas, pero no han evitado descensos de entre el 2% y el 4%.
Jornada negra para las bolsas
La Bolsa española, por ejemplo, ha caído el 2,69% y el Ibex-35 ha aguantado la cota de los 9.600 puntos (9.670,60) a pesar de que todos sus valores han acabado en rojo.
La gran perjudicada de la jornada en todo el continente ha sido la banca. También en España, donde sus títulos se ha desplomado por encima del 3%: CaixaBank (5,29%), Banco Popular (4,28%), BBVA (4,06%), Banco Sabadell (3,97%), Banco Santander (3,16%) y Bankinter (3,08%). Sacyr ha sido el valor que más ha perdido durante la jornada, con un retroceso del 5,69%, y los otros grandes, como Telefónica o Repsol, también han acabado la jornada con importantes pérdidas y han cedido un 2,2% y un 1,29%, respectivamente.
Lo mismo ha ocurrido en el resto de Europa, donde solo hay números rojos. Entre las que más han perdido destaca la Bolsa de Milán, que ha cerrado bajando un 3,96%. El descenso se produce a pesar de que la Comisión Nacional del Mercado de Valores de Italia (CONSOB) decidió el domingo limitar las "ventas al descubierto".
El resto de las Bolsas europeas también han seguido la tendencia bajista. Al cierre, Atenas ha caído un 3,48%; Lisboa, un 4,43%; Fráncfort, un 2,33%, París un 2,71%, y Londres un 1,03%.
La deuda italiana marca récords
Las primas de riesgo de los países periféricos de la zona euro continúan disparadas. La de Grecia ha cerrado en los 1.388 puntos básicos desde los 1.357 del viernes, y las de Irlanda y Portugal han rebasado los 1.000 puntos básicos. En concreto, la irlandesa se ha colocado en los 1.025 puntos y la portuguesa, en los 1.027.
La de Italia, por su parte, marcaba un récord al llegar a los 300 puntos básicos respecto al bono alemán. Según los últimos datos, la rentabilidad de los títulos italianos a diez años ha subido hasta el 5,679%, frente al 5,264% en los que cerró la semana pasada.
Hace un año, la prima de riesgo de España rondaba los 206 puntos básicos; la de Italia, los 138; la de Irlanda, 192; la de Portugal, los 202 puntos básicos; y la de Grecia, que ya entonces había necesitado ayudas de la UE, rozaba los 700 puntos básicos.
"Los inversores están mostrando que las medidas de disciplina fiscal tomadas en los diferentes países europeos no son suficientemente válidas para ellos", han explicado los analistas consultados por Efe. En el otro extremo, los Gobiernos, que piden tiempo para que sean efectivos esos planes de austeridad.
En el mercado de divisas el euro se debilitaba frente al "billete verde" estadounidense. El cambio entre las dos monedas ha quedado establecido en 1,4027 dólares.
El problema de fondo es Grecia
Hace unas horas, la canciller alemana, Angela Merkel, ha señalado que Italia debe demostrar que está llevando a cabo las reformas presupuestarias necesarias para restaurar la confianza en la zona euro.
Antes, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha señalado, tras anunciar la remodelación del Gobierno, que el "problema de fondo es la capacidad de Grecia para hacer frente a su deuda".
Zapatero ha añadido que es necesaria "la clarificación rápida y precisa" de la participación de la banca en el segundo rescate a Atenas antes que la falta de confianza se extienda a más países y ha pedido "una respuesta europea".