La OTAN ha respaldado a los rebeldes libios y ha rechazado la oferta realizada este sábado por el líder libio Muamar Gadafi de un alto el fuego y la apertura de negociaciones para superar la guerra civil en Libia, y ha resaltado que las fuerzas progubernamentales deben cesar todos sus ataques contra civiles, según ha anunciado un responsable de la Alianza.
"Deseamos ver acciones y no solo palabras", ha añadido el portavoz.
La resolución 1973 del Consejo de Seguridad, que autoriza a tomar las medidas necesarias para proteger a los civiles libios, "indica explícitamente que deben finalizar los ataques y el maltrato a los civiles", precisa la OTAN.
"El régimen ha anunciado el alto el fuego varias veces y ha continuado atacando a las ciudades y a los civiles" ha continuado el portavoz. "Todo esto debe parar, y parar ya", ha señalado.
"Todo alto el fuego o solución pacífica debe ser creíble y verificable. Y debe abrir la vía a una solución política que satisfaga las demandas legítimas del pueblo libio hacia las reformas políticas", ha agregado.
Gadafi ha insistido en su alocución televisada que no renunciará al poder y ha convocado a Francia y Estados unidos a que negocien con él una salida a la crisis.
Los rebeldes libios no quieren hablar de negociaciones
El Consejo Nacional Transitorio (CNT), máximo órgano de dirección de los rebeldes libios, ha rechazado el alto el fuego propuesto por Muamar al Gadafi en un discurso emitido por la televisión estatal.
"El régimen de Gadafi ha perdido toda la credibilidad, el pueblo libio no puede imaginar o aceptar ningún futuro en Libia en el que el régimen del coronel desempeñe cualquier papel", ha subrayado el vicepresidente del CNT, Abdelhafid Ghoga, en un comunicado difundido en Bengasi.
"(Gadafi) ha ofrecido repetidamente ceses del fuego sólo para continuar violando los derechos humanos fundamentales, las leyes humanitarias internacionales, y la seguridad de Libia y toda la región", afirmó Ghoga en referencia a las múltiples ocasiones en las que Trípoli ha declarado treguas, nunca respetadas hasta el momento.
"Miles de civiles inocentes han muerto o han resultado heridos. Muchos otros han sido detenidos, torturados o siguen desaparecidos", ha dicho el vicepresidente del CNT y recalcó que el tiempo para un compromiso ya ha expirado.
Por su parte, el portavoz de los rebeldes Yalal al Galal ha declarado, respecto a la supuesta tregua, que "no hay nada que negociar" ya que Gadafi "no deja de violar los derechos humanos" en el país y "no aceptaría nunca las condiciones establecidas por la ONU", esencialmente que sus tropas se retiren de las ciudades y permitan la entrega de ayuda humanitaria.
"Gadafi ya no representa al pueblo libio y el pueblo ya no le quiere", destacó Galal y aseguró que, si permitiera las manifestaciones pacíficas y la libertad de expresión en las zonas que controla, los libios acabarían derrocando a quien se ha mantenido al frente del país desde hace más de 41 años.