Un frente frío con fuertes tormentas ha causado daños importantes en Rusia días después de la ola de calor e incendios forestales que ha afectado al país en las últimas semanas. El temporal ha entrado por el noroeste y se dirige a Moscú.
El primer ministro ruso, Vladimir Putin, afirma que "se han dado instrucciones" para "reparar lo más rápidamente posible las consecuencias" provocadas por el paso de esta ola de frío y "para movilizar a los servicios médicos y sociales", señala en un comunicado remitido por el Gobierno.
Los fuertes vientos y tormentas eléctricas han derribado árboles y dejado sin electricidad a cerca de 100.000 personas, según señala la delegación de Situaciones de Emergencias del Ministerio en San Petersburgo.
"Cerca de 1.500 localidades en las que habitan 93.841 personas se han quedado sin luz en la región de San Petersburgo y en las cercanas Novgorod, Pskov, Vologda y Arkhangelsk.
Además, dos grúas de obra de 50 metros de altura han caído en diferentes lugares de la antigua capital imperial, hiriendo de gravedad a una mujer que pilotaba uno de los engranajes.
El frente se dirige a Moscú
El servicio meteorológico de Rusia ha emitido una alerta en Moscú y la región. "Un frente atmosférico que ya ha provocado importantes extragos en el noroeste de Rusia se está desplazando hacia la capital, dicen estos servicios en declaraciones recogidas por Itar-Tass.
En Moscú se esperan "fuertes lluvias, granizo y ráfagas de viento de hasta 28 metros por segundo", agregan.
La parte occidental de Rusia se ve afectada desde el comienzo del verano por una ola de calor sin precedentes, que ha provocado numeros incendios forestales y ha arrasado casi más de un millón de hectáreas en el país desde finales de julio y al menos 54 muertos, según el balance oficial. La mortalidad se duplicó debido al humo.
José Carlos Gallardo narra la ola de humo que cubre moscú provocada por los incendios forestales de lso alredeodres de la ciudad. Ha contado como la visibilidad a primera hora de la mañana era imposible a una distancia mayor de 400 metros. (04/08/10)
Actualmente, más de 50.000 hectáreas continúan ardiendo, especialmente cerca de un centro nuclear en Sarov (500 km al este de Moscú).