En lo que llevamos de año, los incendios han arrasado más superficie forestal que en todo 2008. 47.000 hectáreas frente a las 40.000 del año pasado.
Seis bomberos muertos, en Tarragona y Teruel, una docena de heridos y miles de personas desalojadas es el balance de la hasta ahora peor semana del verano.
Todo el este, desde Cataluña hasta Andalucía ha sufrido las consecuencias del fuego aliado este año con una climatología especialmente adversa, por la falta de humedad, y por el viento.
La sierra de la Cabrera, en Almería ha sido el último punto negro de esta semana de fuego que empezaba el martes con la muerte de cuatro bomberos de élite en el incendio de Horta de Sant Joan, en Tarragona, al quedar atrapados por las llamas en un barranco.