Uno de los bomberos de la Generalitat que resultaron heridos en el incendio que desde el lunes afecta el parque natural dels Ports, en Horta de Sant Joan (Tarragona) está en estado "muy crítico" con una insuficiencia respiratoria desde su ingreso en el Hospital Vall d'Hebrón de Barcelona, y el otro está estable dentro de la gravedad, ambos en la Unidad de Quemados.
La consellera de Salud, Marina Geli, ha explicado que el menos grave, de 36 años, tiene el 75% del cuerpo quemado -extremidades, cara y abdomen--, si bien está teniendo una "evolución favorable", mientras que su compañero, de 31, tiene el 50% quemado y sufrió complicaciones durante la noche, entre ellas un fallo renal.
Los cuatro bomberos fallecidos están ya en el Tanatorio de Tortosa para realizar las autopsias a los cuerpos. Hasta allí tiene previsto desplazarse el presidente de la Generalitat, José Montilla, que ya visitó esta mañana a los dos heridos, para dar su apoyo y pésame a los familiares.
En Horta de Sant Joan, los servicios de emergencias están trabajando desde hace 38 horas y han atendido por el momento a 14 personas heridas leves, la mayoría bomberos o voluntarios que ayudaban en las tareas de extinción. Hay desplegados siete dispositivos de ambulancias y tres helicópteros medicalizados.
Además, se está ofreciendo acompañamiento psicológico a las familias de los fallecidos y heridos, y también a los vecinos del municipio.
Momentos difíciles para los bomberos
El conseller de Interior, Joan Saura, señaló que el fuego ya ha calcinado unas 800 hectáreas y que hay dos flancos del incendio abiertos, aunque "no hay peligro para la población".
Saura anunció que va a comparecer en el Parlament para explicar los hechos y lamentó las críticas que han recibido los Bomberos, que en estos momentos están pasando "momentos difíciles".
Hizo hincapié en que el viento ha sido "fundamental" para la propagación del incendio y negó las acusaciones por parte del alcalde del municipio de que hubiera habido una relajación de los Bomberos a primera hora de la tarde.
Saura confió en poder avanzar en las tareas de extinción aunque admitió que es "difícil" por la situación geográfica, que no permite el acceso de las unidades móviles, por lo que se tiene que avanzar a pie o con medios aéreos, que en muchos momentos no pueden salir por las fuertes rachas de viento.
El conseller reiteró su pésame a las familias de las víctimas, que "han muerto defendiendo la seguridad" de los ciudadanos y pidió a la ciudadanía que apoye al Cuerpo de Bomberos en estos momentos complicados.