El presidente fundador del PP, Manuel Fraga, ha dicho hoy que es un "disparate" y un "error gravísimo" resucitar los problemas del pasado, al ser preguntado sobre la decisión del juez Baltasar Garzón de investigar las desapariciones de la Guerra Civil y de la dictadura franquista. Mientras, la portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afirmado que el auto de Garzón es "otra cosa" distinta a la administración de Justicia.
Fraga ha hecho estas declaraciones a los periodistas minutos antes de asistir a la conferencia que ha pronunciado en Madrid el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, en un desayuno informativo que ha organizado por Nueva Economía Fórum.
"Es un disparate que un señor se autodefina competente en un asunto que es muy discutible que tenga competencia nadie puesto que ya hubo leyes de amnistía", ha señalado el senador gallego.
Ha apuntado, además, que "políticamente" es un "error gravísimo" resucitar los problemas de la Guerra Civil y de lo que fue una tragedia para ambas partes. Precisamente ayer Garzón autorizó la apertura de 19 fosas en toda España en las que estima que se encuentran restos de desaparecidos durante la Guerra Civil y la dictadura franquista (1936-1975), entre ellas la del poeta Federico García Lorca.
Aguirre apoya el derecho de las víctimas
Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, entrevistada en Radio Nacional, se ha mostrado a favor del derecho de todos los ciudadanos a que conozcan el paradero de sus familiares desaparecidos.
Sin embargo, considera que no tiene sentido que Garzón haya pedido el certificado de defunción del dictador Franco y otros protagonistas del levantamiento militar que llevó a la Guerra Civil. Asegura que es como si ahora que se celebra el bicentenario del 2 de mayo, se pidiera el certificado de muerte de Napoleón.