Los Gobiernos de los ocho países más industrializados del planeta, el denominado G8, han decidido convocar una reunión de urgencia, en "un futuro cercano", para abordar la grave crisis que sufren los mercados financieros.
En un comunicado difundido por la Casa Blanca, los líderes de Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos, junto al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, han mostrado su compromiso por resolver juntos la crisis y restaurar la confianza en los sistemas financieros.
La fecha de la reunión, sin embargo, no ha sido avanzada, señalando el comunicado que se celebrará "en un momento apropiado, en el futuro cercano, para adoptar una agenda para las reformas".
Trabajo coordinado
¿Aunque nuestro objetivo ahora se centra en la tarea inmediata de estabilizar los mercados y restablecer la confianza, son necesarios cambios en la regulación y en el régimen institucional de los sectores financieros globales, para remediar la deficiencias expuestas por la actual crisis¿, indica el comunicado.
El G8 insta a continuar con la cooperación y la coordinación internacional, así como a actuar de forma que se limite el impacto de la crisis en las economías emergentes y los países en desarrollo.
"Confiamos en que, trabajando juntos, superemos los actuales retos y devolvamos a nuestras economías a la estabilidad y la prosperidad", añade el comunicado.