El Real Madrid se ha clasificado por primera vez en su corta historia para la final de una competición tras lograr una victoria muy clara ante el Athletic Club de Bilbao. El sábado las merengues se disputarán la Copa de la Reina en un derbi ante el Atlético.
La segunda semifinal, disputada este miércoles en Butarque (el estadio de Leganés que acoge la Final Four), solo ha tenido un color, el blanco.
A los siete minutos el equipo madridista se adelantó ya con un golazo de Caroline Weir. Claudia Zornoza buscó a la escocesa, que bajó el balón con un gran control en la frontal, casi sin mirarlo, de cara a puerta, y lo picó para superar a Mariasun Quiñones
El Madrid atacó sobre todo por la banda izquierda en los primeros minutos por mediación de Linda Caicedo, que mandó un balón al palo. Y para colmo, al Athletic se le complicó el plan por la lesión en una rodilla de la central Valdezate.
A los 26, el Real Madrid amplió su ventaja tras un buen centro de Weir que Toletti voleó a la media vuelta. Y antes del descanso, puso tierra de por medio cuando Athenea del Castillo remató en el primer palo a bote pronto y entrando en carrera tras un centro por la izquierda de Feller.
Doblete de Weir
La sentencia llegó justo después del descanso. Un mal despeje de Maite Zubieta dentro del área lo aprovechó Weir para marcar a los 18 segundos de la segunda parte. Dos goles y una asistencia de la centrocampista esta noche.
Después, Alberto Toril aprovechó para dar descanso o proteger de cara a la final a algunas de sus piezas clave para el partido contra el Atlético de Madrid, que venció en la semifinal del martes al Alhama FC.
En los prolegómenos del partido, los dos equipos y las árbitras se unieron tras una pancarta con el lema "Racistas, fuera del fútbol" y todas las jugadoras del Real Madrid posaron con la camiseta de Vinicius Jr, tres días después de los insultos racistas que recibió su compañero de club en la liga masculina.
El Real Madrid femenino se suma a las muestras de apoyo a Vinicius con la camiseta del '20'
Y tras el encuentro, la felicidad de las madridistas contrastó con la desolación de las jugadoras del Athletic, en particular de Nekane, desconsolada en su despedida del fútbol.