Chile eliminó este miércoles a Uruguay, campeón de la Copa América del 2011, tras ganar 1-0 y avanzó a las semifinales de la 44 edición del torneo gracias a un gol de Mauricio Isla a los 80 minutos.
Hace 32 años que la Roja no vencía a la Celeste en la Copa América y este triunfo, con un golazo de Isla a pase de Jorge Valdivia, más que un premio a su buen fútbol, fue la recompensa por el tesón y la perseverancia de sus jugadores. Chile presionó y se estrelló muchas veces contra una defensa granítica, hasta que la derribaron cuando ya se defendía con diez jugadores por la expulsión de Edinson Cavani en la segunda parte.
Ambos equipos salieron decididos a imponer sus términos pero a Chile le costó más acomodarse, lo que aprovechó el equipo celeste para llegar a la zona e incomodar al portero Claudio Bravo en dos laterales servidos al corazón del área y con un remate de Christian 'Cebolla' Rodríguez, que salió desviado.
Poco a poco comenzó a funcionar el medio campo de la Roja y Díaz, Aránguiz y Vidal pudieron alimentar a sus delanteros, especialmente por la derecha, donde Isla fue un eficaz agente ofensivo.
El gol no llegaba
No obstante la falta de remate a gol afectó de nuevo a los chilenos. Vargas no lograba empalmar algún balón, Alexis Sánchez no aparecía aún y Valdivia se enzarzó en reclamos y jugadas bruscas que le costaron ser el primer amonestado del partido.
Uruguay cedió el control a Chile pero amenazó al contragolpe con un remate cruzado de Carlos Sánchez y un tiro libre que continuó en un córner durante la primera mitad del partido. Muslera tuvo más trabajo que su colega Bravo en el primer tiempo y respondió bien ante remates de Aránguiz y Alexis Sánchez.
La intensidad aumentó en el arranque de la segunda mitad con jugadas ofensivas en ambas áreas. Bravo debió exigirse al máximo ante un tiro bajo de Rolán, además de cortar un par de balones llovidos.
Arturo Vidal cabeceó con poco ángulo un centro de Mena desde la izquierda pero Muslera respondió bien, y tres minutos después, Cavani recibió su segunda amarilla tras abofetear a Gonzalo Jara y fue expulsado.
Uruguay acabó el partido con nueve jugadores
Con diez Uruguay se replegó y levantó en su sector una muralla contra la cual se estrellaba una y otra vez el ataque chileno, que no lograba inquietar a Muslera, pese a que Sampaoli envió al campo a Matías Fernández y a Mauricio Pinilla. Chile siguió dominando el partido y atacando, hasta que tuvo su premio. A pase de Valdivia, Isla desde la línea del área sacó un remate que se deslizó raudo hasta el fondo de las mallas celestes.
Uruguay sacó a relucir el juego fuerte, que le valió la segunda amarilla y la expulsión a Jorge Fucile, tras un golpe a Alexis Sánchez. La decisión sacó de casillas a los uruguayos que empujaron al árbitro brasileño Sandro Ricci y a uno de los asistentes; los suplentes entraron al campo, encabezados por el técnico Oscar Washington Tabárez, que también fue expulsado.