La victoria de España ante Bielorrusia (2-1) se fraguó en el juego que siempre caracteriza a los chicos de Del Bosque. Una posesión infinita que busca madurar el partido hasta que la manzana se cae del árbol por sí misma.
Pero a veces, madurar tanto los partidos ante rivales que siempre juegan a los mismo, defender, defender y volver a defender, con una línea de cinco hombre en defensa y otra de cuatro casi pegada, se corren ciertos riesgos como un gol en los minutos finales que complique el desenlace final.
Los oponentes de España, salvo casos excepcionales como el de Francia, Brasil en la Confederaciones o el último amistoso ante Chile, salen a poner la 'muralla' y a intentar pescar un balón perdido para montar la contra y sorprender con algún gol y volver a echar la llave a la puerta.
En el partido de Son Moix, donde España se jugaba tres cuartos de billete directo al Mundial de 2014, Del Bosque apostó desde el inicio por Valdés en la portería y Michu como referencia arriba.
La primera decisión no debería sorprender, si se atiene al buen momento que atraviesa el cancerbero azulgrana, quizá el mejor de su carrera, y la suplencia prolongada de Casillas, que solo ha sido titular en dos ocasiones en Champions esta temporada.
El portero catalán pasó desapercibido en el encuentro gracias a la inoperancia de su rival y la alta posesión de España. Los bielorrusos tiraron en tres ocasiones a portería y una de ellas acabó en el 2-1 en los instantes finales del partido, si bien era tan clara la oportunidad que Valdés no pudo hacer nada.
La decisión de introducir a Michu desde el inicio, debutaba con la 'Roja', y dejar a Negredo en el banquillo pudo ser la más discutida en un choque en el que estaba en juego parte del billete al Mundial.
El delantero del Swansea fue convocado a última hora por la baja de Villa, lesionado en la jornada de liga ante el Celta. Michu estuvo muy estático todo el partido y benefició poco la circulación de balón, finalmente fue cambiado en la segunda mitad por Negredo, autor del segundo gol.
Xavi, la referencia indiscutible
Lo mejor que mostró España ante Bielorrusia fue, de nuevo, el centro del campo, su joya de la corona. Xavi rindió a un gran nivel, ese que llevó a España a conquistar dos Euros y un Mundial.
El capitán del Barça estuvo muy activo todo el partido y dirigió al equipo como a una máquina perfectamente engrasada. Si bien es cierto, que la frescura en el juego del equipo pasa por la misma suya.
Le acompañaban Fábregas, Silva, Pedro y Busquets. El sacrificado fue Iniesta, que fue reservado para la segunda parte por las molestias que presentó durante la semana.
Ante la estéril posesión de la primera parte, Del Bosque buscó dar un vuelco al partido en la segunda mitad y apostó por dejar una defensa de tres, quitó a Monreal, e introdujo a Iniesta para que abriese las bandas junto a Pedro. El salmantino optó por dejar que Michu siguiese siendo la referencia arriba.
Una decisión que tardó en cambiar once minutos desde la reanudación. Negredo pasó a ocupar la delantera española. El jugador del Swansea abandonó el campo con sabor agridulce. Un partido menos exigente hubiese sido un mejor escenario para el debut.
Con todos los 'jugones' en el campo, España empezó a profundizar más en su juego, hasta que logró el primer tanto de uno de los hombres del partido, Xavi. El veterano jugador abrió la lata con un remate seco dentro del área. Fue el mejor junto a Silva y Pedro.
Cambios para ensanchar el campo
Del Bosque buscaba ensanchar el campo para encontrar una brecha en el muro bielorruso. España necesita soluciones en este tipo de partidos para 'matarlos' en su tiempo justo y no estar esperando hasta el final.
Además de abrir las bandas, la 'Roja' debe optar por otras opciones como los tiros desde lejos para sorprender al portero. Los rivales le esperan muy atrás, sabedores de que siempre intentan entrar hasta la 'cocina'.
El que demostró que la lucha por el '9' de cara al Mundial va a ser dura es Negredo. El de Vallecas es el mejor punta español del momento, sin contar con el futurible Diego Costa. Del Bosque tendrá complicada su elección si finalmente el brasileño decide vestir la elástica roja en el Mundial que se celebra en su país.
España está a un punto de cerrar su pase a Brasil, donde deberá defender título en un escenario histórico para el fútbol. Los de Del Bosque confirmarán el pase directo, si no hay sorpresas, ante Georgia el próximo martes.