Cuando uno de los entrenadores más tranquilos y más respetuosos del fútbol mundial como Manuel Pellegrini sentencia en rueda de prensa que "un equipo sancionado no podía jugar la final de la Champions" es porque, indudablemente, algo gordo ha pasado en el Borussia 3-2 Málaga.
Pellegrini: "No es solo una jugada, al final no hubo arbitraje"
El chileno no solo se refería a la jugada decisiva del tercer gol del Borussia de Dortmund en el que hasta cinco jugadores estaban en fuera de juego, estaba molesto por el arbitraje que el escocés Craig Thomson practicó durante todo el partido, especialmente tras el gol de Eliseu. "Después de nuestro 1-2 no hubo arbitraje. A mis jugadores los han encerrado atrás a base de pelotazos y codazos. Hubo dos expulsiones que no se sancionaron, un doble fuera de juego y así es imposible clasificarse", afirmó.
Todo esto le ha pasado al único equipo al que la UEFA ha tenido el valor de sancionar con la prohibición de jugar en Europa en alguna de las cuatro próximas temporadas. La medida, explicó en su día la propia UEFA, fue adoptada a instancias del Comité de Control Financiero de Clubes en relación con el proceso abierto en septiembre a 23 clubes. De los 23, tan solo el Málaga ha sido sancionado y ahora es el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) el órgano último que puede levantar o no el castigo en las próximas semanas.
"El fútbol es un deporte en el que influyen muchos factores. No pudimos o no quisieron que pasásemos", insistió Pellegrini refiriéndose claramente a lo incómodo que resultaría para el organismo que preside Michel Platini que al equipo que se ha tomado como cabeza de turco se plante entre los cuatro mejores del viejo continente.
El jeque catarí Abdullah Bin Nasser Al-Thani, propietario del Málaga, fue todavía más allá y aireó a través de una red social que el Málaga había caído por culpa de la "injusticia y el racismo". Al-Thani espera que se abra "una investigación a través de la UEFA" que "no afecte al espíritu del deporte" porque "esto no es fútbol, sino racismo".
En Alemania no quieren saber nada de favores arbitrales
La derrota del Málaga en el Iduma Park de Dortmund se añade a la lista de conjuntos españoles que han sido víctimas de equipos teutones en torneos europeos en circunstancias muy desgraciadas. El Getafe vivió algo parecido hace cinco años en la Liga Europa frente al Bayern de Múnich con dos goles de Luca Toni en la prórroga, la Real Sociedad contra el Hamburgo en las semifinales de la Copa de Europa del 83 y la más cruel, el gol de Schwarzenbeck en el minuto 119 de la final de la Copa de Europa de 1974 que mandaba al Atlético de Madrid al partido de desempate en el que más tarde caerían 4-0.
Lógicamente, ni el entrenador del Borussia de Dortmund ni la prensa teutona hablan de Craig Thomson y sí en cambio de "milagro", "locura" o "merecimiento".
El entrenador del Borussia, Jurgen Klopp, se mostró muy feliz por el pase a las semifinales y respecto al colegiado solo se limitó a recordar que el segundo tanto del equipo español fue "en fuera de juego". "Nuestro gol fue en fuera de juego, pero el segundo del Málaga también, Esta es una información muy importante que no tenemos que olvidar", explicó.
"Creo que haciendo un resumen de los dos partidos, hemos sido merecedores del pase", añadió.
La prensa alemana por su parte celebra el triunfo en el último minuto y destaca que lo vivido en el descuento ha sido 'El milagro de Dortmund' como titula el tabloide Bild o el Die Welt.
Más un adiós que un hasta luego
El decir adiós al sueño europeo puede significar mucho más para el equipo entrenado por manuel Pellegrini. Más allá de que el TAS ratifique la sanción o la invalide, el equipo malacitano discurre ahora sexto en la Liga a cuatro puntos de la Real Sociedad que es cuarta y no será sencillo levantar el ánimo de la plantilla después del mazazo de Dortmund.
El hecho de jugar la Champions reporta a la ciudad andaluza una promoción y un desembolso económico que difícilmente podrá repetirse. La lección de fútbol del Málaga en Alemania la vieron aproximadamente unos 40 millones de personas en todo el mundo y de eso se beneficia la imagen de la ciudad, la Costa del Sol y la marca Andalucía.
El sueño estuvo a punto de continuar mínimo dos semanas más pero finalmente no ha podido ser. Cada uno puede achacarlo a lo que quiera pero algunos como Joaquín ya tienen su posición tomada: "Sospechamos de Platini y de todos los que están ahí porque somos el Málaga y no el Real Madrid", manifestó el extremo a los medios tras el partido.