Roger Federer aseguró, tras adjudicarse su sexto título de Wimbledon, que la final disputada contra el estadounidense Andy Roddick fue "un partido loco" después de que hicieran falta treinta juegos para decidir el quinto y definitivo set [Las imágenes de la final] [Los 15 'grandes' de Federer].
El suizo se colocó nada más acabar el duelo una cazadora con el número 15 bordado en un extremo, exactamente la misma cantidad de Grand Slam que ha ganado en su carrera y que lo convierten en el tenista con más "grandes" en su palmarés de la historia de este deporte.
De esta forma supera los 14 títulos conseguidos por el estadounidense Pete Sampras, quien estuvo presente en la pista, y a quien agradeció su asistencia y le dijo que es "una leyenda" de este deporte.
Federer resaltó el buen trabajo realizado por su rival, al que ha ganado en 19 de los 21 partidos que han disputado: "Él jugó de forma increíble, jugó un extraordinario campeonato. Pero, desafortunadamente, en tenis siempre tiene que haber un campeón".
"No te preocupes, yo llegué hasta aquí el año pasado y Nadal me ganó en cinco sets. Estoy convencido de que regresarás y serás campeón también", le dijo a un Roddick hundido por su derrota.
Recuerdo para Nadal y ovación para Roddick
El suizo recordó de esta forma durante su alocución en la pista Central de Wimbledon la derrota que sufrió hace un año frente al español Rafa Nadal, quien le venció en una de las finales más vibrantes de la historia del torneo londinense.
Además, al ser interrogado sobre la recuperación del número uno en detrimento del español, Federer recordó que Nadal no pudo acudir a Wimbledon por una lesión.
La pista Central de Wimbledon dedicó una sonora ovación al perdedor, el estadounidense Andy Roddick, quien agradeció el gesto e intentó contener la emoción tras las más de cuatro horas que duró el partido, y en el que luchó hasta el final por alzarse con el trofeo.
Roddick negó que su derrota fuera "cruel" y felicitó al campeón, además de dirigirse a su compatriota Sampras, para pedirle disculpas por no haber conseguido evitar que Federer lo sobrepasara. "Lo intenté. Lo siento Pete", dijo.
Sampras y Laver, admiradores del suizo
Por su parte, Sampras también reconoció en declaraciones a la BBC el mérito del suizo, al que calificó de "leyenda", y subrayó la facilidad con la que Federer "alcanza su mejor nivel". "En mi libro Federer es el más grande. Es una leyenda, un icono, un tributo a este deporte". Lo dice 'Pistolero Pete', el tenista de los servicios implacables y las voleas imposibles, rendido ante su sucesor.
Federer, que ganó su primer torneo del Grand Slam precisamente en Wimbledon, en 2003, lo ha levantado en seis ocasiones, cinco de ellas consecutivas, del mismo modo que consiguió sus cinco Abiertos de Estados Unidos. Tres Open de Australia y un Roland Garros logrado este mismo año completan su impresionante currículo en el olimpo del tenis.
Del resto de grandes tenistas, sólo Rod Laver es el que más se le parece en el estilo. El australiano, ganador de once 'grandes', disfruta viendo en acción a Federer. "Creo que el público debería mirar sus pies, mirar sólo a Federer y no a la pelota, y entonces verían cómo un gran jugador como él realiza sus golpes".
Quizá otros jugadores tengan un servicio más fuerte, resten mejor o sean más atléticos, pero su estilo y habilidad en la pista y su técnica exquisita hacen de Federer un tenista sin igual.