Cualquier mínimo cambio, incluso la visita de unos amigos, puede hacer que nuestros cimientos se tambaleen. De hecho, según el dramaturgo Edward Albee, todo el mundo vive en ‘Un delicado equilibrio’. Ahora, este texto lúcido y revelador llega al escenario del Teatro Fernán Gómez de Madrid con dos actrices de excepción: Alicia Borrachero y Manuela Velasco.
En ‘Culturas 2’, programa disponible en RTVE Play, Alicia Borrachero y Manuela Velasco reflexionan sobre la obra de teatro y las apariencias que se mantienen en la sociedad. En tiempos de redes sociales, Borrachero sostiene que intentamos dar una imagen que, aunque sea honesta, no es la completa: “Más que vivir la vida, estamos aprendiendo a retransmitirla”.
“Los personajes se hacen daño exquisitamente“
Después de su estreno en 1966, Edward Albee consiguió con ‘Un delicado equilibrio’ uno de los tres Pulitzer que obtendría a lo largo de su carrera. “Los diálogos son magníficos, los personajes son personas educadas capaces de argumentar y pensar”, valora Velasco. “No tienen vómitos de bronca, sino que se hacen daño exquisitamente, casi con precisión quirúrgica”, añade.
Nueva traducción de ‘Un delicado equilibrio’
Para esta nueva versión de 'Un delicado equilibrio', dirigida por Nelson Valente, Alicia Borrachero, junto con el intérprete Ben Temple, su marido en la ficción y en la vida real, realizaron otra traducción de la obra original, ya que consideraban que las que había estaban más pensadas para ser leídas que para ser interpretadas. “Los personajes hablan muchísimo y son muy locuaces, tienen un lenguaje elevado e inteligente”, afirma la actriz.
En ‘Culturas 2’, la actriz Manuela Velasco también recuerda cómo fue la primera vez que subió a un escenario con la obra ‘Todos eran mis hijos’, donde sintió que se iba a morir de los nervios: “Me puse la mano en el corazón, sentí los latidos y entendí que era todo lo contrario, que significaban que estaba muy viva”.
‘Un delicado equilibrio’ estará en el Teatro Fernán Gómez de Madrid hasta el 28 de abril. Después, la obra se representará el 3 de mayo en el Teatro Principal de Alicante y el 11 de mayo en el Muxikebarri Zentroa de Getxo.