Si nunca te has casado, puede que no te suene de nada. Si ya has pasado por el altar o estás a punto de hacerlo, no solo sabes lo que significa, además, te habrás hecho la clásica pregunta: ¿necesito realmente una Wedding Planner que me ayude a organizar la boda de mis sueños o puedo hacerlo solo? Puede que hayas visto alguna película y te habrás hecho una idea equivocada de cuáles son las funciones de esta figura tan desconocida y a la vez tan imprescindible si lo que quieres es que todo salga a pedir de boca el gran día.
Tranquila, no se va a enamorar de tu novio como Jennifer López en Planes de boda o Belén Cuesta en Hasta que la boda nos separe y es poco probable que tu madre o tu suegra se emborrache y la líe hasta tal punto que ni siquiera ella pueda solucionarlo. Si has visto 27 vestidos, pensarás que es un trabajo de lo más agotador, y ahí no te equivocas, porque una Wedding Planner tiene que lidiar con muchos imprevistos. Imagínate que dos de tus clientes quieren el mismo día y el mismo sitio para su boda, como en Guerra de novias.
La de Wedding Planner es una profesión cada vez más demandada, pero ¿por qué? ¿Qué es lo que realmente puede hacer por nosotros? ¿Cuáles son sus funciones? Desmontamos los mitos alrededor de esta figura y te explicamos por qué tú también necesitas una en tu boda.
¿Por qué tú también necesitas una Wedding Planner en tu boda?
Organizar una boda puede ser estresante, precisamente para ayudarte con los preparativos y ponerte las cosas mucho más fáciles está al Wedding Planner. Si sueñas a lo grande con ese día, pero no sabes por dónde empezar, pero, sobre todo, si lo que quieres es olvidarte de las responsabilidades de planear un evento como este y disfrutar del proceso, necesitas contratar sus servicios. ¿Qué te puede ofrecer una Wedding Planner que no tengas tú? Experiencia y contactos, entre otras muchas cosas que ahora vamos a enumerar.
Eugenia Hernandez Antolin Cabello de los Cobos en el día de su boda GTRES
1. Da forma a vuestra idea: Habéis buscado inspiración y tenéis cientos de fotos guardadas en el móvil. Lo primero que va a hacer la Wedding Planner es escucharos para entender qué es lo que queréis para dar forma a vuestra idea. Cada boda es única y especial y es su tarea construir el proyecto desde cero teniendo en cuenta vuestros gustos y estilo.
2. Soluciona y previene problemas: ¿Qué pasa si el catering cancela en el último momento? ¿Y si el restaurante tiene que cerrar por problemas técnicos? Puede que caiga una tormenta el día de tu boda y vosotros hayáis planeado celebrarla al aire libre, que se hayan formado charcos en el césped y los invitados se llenen de barro... La ley de Murphy: si algo puede salir mal, saldrá mal. De todos estos imprevistos se encargaría la Wedding Planner para que vosotros solo tengáis que preocuparos de disfrutar al máximo.
La influencer Marta Lozano y su marido en el día de su boda GTRES
3. Ahorra tiempo y dinero: Buscar proveedores, pedir presupuestos, negociar con ellos, concertar citas, buscar el lugar perfecto, las flores, la música, el catering, el fotógrafo... Aunque parezca mentira, son muchas las tereas de las que se ocupa una Wedding Planner, que tira de su agenda de contactos seleccionados previamente según vuestros gustos. Además, ajustará el presupuesto al máximo para que contratar sus servicios también sea una inversión para ti.
4. Vuestra persona de confianza: Si contratáis a una Wedding Planner para tu boda, podéis estar tranquilos. No tendréis que estar pendientes de otra cosa que no sea pasárselo bien. ¡Todo saldrá bien! Ella te dará la confianza que necesitas.
Decoración de una mesa en una boda
5. El día B: Supervisar el montaje, comprobar que todo funciona, como el equipo de sonido, facilitar el trabajo a los proveedores, recibir a los invitados, coordinar la entrada de la novia, etc. El objetivo es que toda fluya.