Carmina Barrios es siempre garantía de espectáculo. Y lo hemos comprobado en multitud de ocasiones en su paso por MasterChef. Pero si además su vecino de cocinas es Mario Vaquerizo, el show se multiplica. Y esto fue lo que pasó en el primer reto de la gran final de MasterChef Especial Navidad. Los aspirantes se enfrentaron al clásico seguir al chef, en esta ocasión por partida doble, ya que Fina Puigdevall y Martina Puigvert, del restaurante Les Cols, ejercieron como maestras de ceremonia. Y Carmina y Mario estuvieron a punto de quemar las cocinas. ¿Qué pasó?
Desde el primer minuto de la prueba, Carmina Barrios no fue capaz de seguir el ritmo de las dos chefs invitadas. E incluso en varios momentos amenazó con abandonar el cocinado: “No puedo más”. Eso sí, rápidamente, encontró una solución a sus problemas: compartir elaboraciones con Mario Vaquerizo. Todo aquello a lo que no llegaba la actriz, lo cogía de la cocina de Mario. Incluso llegamos a escuchar como le decía “cojo tu biberón, que lo tuyo es más bonito”.
Fuego en las cocinas de MasterChef
A mitad del cocinado vivimos uno de los momentos más llamativos, y nunca mejor dicho. A lo lejos, Pepe Rodríguez se percató de que una de las cazuelas de Carmina echaba más humo del que debería. “¿Y ese humo que le sale ahí a Carmina?”, exclamó el chef. A continuación, el fuego hizo acto de presencia, y Carmina dejó la cazuela en llamas en el fregadero. Mario Vaquerizo intentó ayudar, abriendo el grifo para apagarlo con agua. Justo lo que no conviene hacer en ese momento. Por suerte, Jordi se acercó y le enseñó cómo solventar el problema, tapando con una bandeja la cazuela para que no entre oxígeno y así apagar el fuego. “Nunca tires agua encima”, le señaló el chef a Mario.
Por suerte, la intervención de Jordi Cruz apagó el fuego y nos hizo aprender una nueva lección en cocinas. Con el susto superado, Mario Vaquerizo recuperó la sonrisa y el humor: “Me he salvado de una buena, porque con esta camisa de lycra me hubiera quemado entero”.