Pep Guinyol, el actor catalán fallecido a los 68 años, será recordado por su físico contundente (era muy grande), pero también por su voz clara, su bonhomía y vis cómica. Sus papeles en televisión eran secundarios, pero imprescindibles. Por eso, su rostro se convirtió en un habitual de las series españolas. De la mítica Farmacia de Guardia a series actuales como Cuéntame cómo pasó o La que se avecina, el actor catalán ha estado presente en las ficciones más icónicas de nuestra televisión.
Uno de sus últimos papeles más representativos fue el de José Luis San Cristóbal, dueño de la inmobiliaria que construía Mirador de Montepinar y que dejaba en la estacada a todos los vecinos del edificio cuando aparecían los problemas que al final han provocado su mudanza. Ejemplo de la corrupción en los negocios inmobiliarios, sus gags estaban repletos de humor en la serie de los hermanos Caballero.
Rostro conocido en los programas infantiles de TV3
En la televisión catalana, TV3, donde Guinyol trabajó durante sus primeros años de emisión, el actor está considerado un icono. Antes de que existiera el Canal Súper 3, TV3 ya emitía programas dirigidos al público infantil cada tarde, cuando los niños volvían de escuela. Era la época de la serie Oliana Molls , de los títeres del Señor Cordills y del programa Fes Flash. Allí aparecían dos títeres de limón y de naranja, como Epi y Blas, pero hablando un lenguaje inexistente "Pu-pu-pe-perri-pé" y el interlocutor de los peludos era un joven actor Pep Guinyol.
Un comediante de la astrología
A finales de los años 80, TV3 le repescó por su concurso más mítico, Tres y el astrólogo. Era el ayudante del astrólogo Joaquim Teixidor, que falleció también hace poco, el pasado febrero, a los 92 años. Eran un tándem perfecto que, ahora, pasa a la historia con el fallecimiento de sus dos componentes.