Durante más de 30 años su nombre lleva siendo sinónimo de las retransmisiones de hípica, patinaje artístico, gimnasia rítmica y artística. Nadie sabe más sobre los Juegos Olímpicos que ella. Su voz ha servido para dar visibilidad al deporte femenino y su figura ha servido para romper un techo de cristal en el periodismo.Ella es Paloma Del Río.
Gente Gespierta - Trasnochamos con Paloma del Río - Escuchar ahora
Sus inicios en el mundo periodístico
A finales de los 80, un grupo de mujeres rompieron ese techo de cristal en el perfil del comunicador deportivo que hasta esa fecha era un mundo de hombres. Unas precursoras entre las que se encontraban Olga Viza, María Escario, Mari Carmen Izquierdo, Elena Sánchez y Paloma del Río, este fue un gran paso en la evolución del periodismo deportivo. Su fuerza y coraje por dar un paso al frente trajo como consecuencia se introdujo más mujeres en este ámbito laboral.
Sin embargo, sus inicios no fueron fáciles y más en un ‘mundo dominado’ por hombres con “un lenguaje muy andrógino destinado mayoritariamente a sus homónimos”. La periodista afirma que cuando ella pisó por primera vez esta casa en el año 86, sus compañeros la miraban mal. “Tuve la sensación de que nos miraban como si estuviéramos invadiendo”.
Su primera gran retransmisión
Aunque te intenten ningunear, menospreciar o minusvalorar de primera, enseguida, “al hacer las cosas bien” uno se incorpora enseguida y Paloma del Río es un claro ejemplo de ello. Su profesionalidad y su valía, le hicieron retransmitir los Juegos Mediterráneos sirios de Latakia. “Me quedé impactada. Porque era una torre de Babel en donde por un lado estaban los periodistas, por otro lado, estaban los deportistas, cada uno con su zona de trabajo. No podíamos mezclarnos. La cantidad de unidades móviles…”, rememoraba la madrileña.
Tras este primer contacto, la periodista ha retransmitido 60 mundiales y europeos de gimnasia artística, rítmica, patinaje, hípica, cuatro Juegos Mediterráneos y 16 Juegos Olímpicos. Todos especiales, pero, si se tuviera que quedar con uno sería la retransmisión de la medalla de bronce de la patinadora Joannie Rochette tras el fallecimiento de su madre días antes de que empezara la competición.
En palabras de Paloma del Río fue “maravilloso ver esa tía. Creo que en ese momento había tanta empatía con ella. Pensar que tú estás jugándote una medalla olímpica y que tu madre está en un depósito de cadáver en un hospital cerquita… Yo creo que esa ha sido una transmisión que me ha marcado mucho”.
Su naturalidad ha conquistado a los amantes del deporte
Su naturalidad, emotividad y espontaneidad es el sello de identidad de la periodista que ha forjado durante su carrera. Estas características las ha adquirido gracias a su madre. “Las primeras trasmisiones que hice de gimnasia, me había preparado el código y me había leído todo y tras la retransmisión, mi madre me dijo lo has hecho muy bien, pero no he entendido lo que has dicho. Y dije, pues vaya panorama”. A partir de esta crítica constructiva decidió que tenía que alejarse del lenguaje técnico.