El centenario del gran Luis García Berlanga fue uno de los acontecimientos culturales del pasado año. Una fecha señalada en el cine español a la que la ceremonia de los Goya 2022 rindirá homenaje el próximo 12 de febrero. Un aniversario tan relevante que casi ha eclipsado la otra gran celebración cultural español del año -al menos en lo que al cine se refiere- cómo es el centenario de ese auténtico gigante qué fue Fernando Fernán Gómez.
Siguiendo la línea de otros especiales de grandes cineastas, cómo fueron Federico Fellini o Ingmar Bergman, en Días de Cine dedicamos un espacio privilegiado para hablar del valenciano universal a través de cuatro capítulos que desgranan las claves del cine y la figura de Luis García Berlanga. Cuatro reportajes rea lizados por Javier Sales, Alberto Bermejo, Alejo Moreno y Virginia García, que tratan de responder a la pregunta de: ¿quién era Luis García Berlanga?
1. Breve diccionario berlnaguiano
El primer capítulo, que se emitirá la próxima semana, y será realizado por Javier Sales, quiere ser al mismo tiempo una aproximación general a Luis García Berlanga, y a la vez oír de lo que se considera un reportaje canónico, de modo que será "Diccionario Berlanga".
2. Azcona y Berlanga, pareja casi feliz
El segundo reportaje, del que se va a ocupar Alberto Bermejo, quién a su vez es el corresponsable del Imprescindibles que se emitirá próximamente en La 2, tendrá como leit motiv "Berlanga, Azcona y España " y creo que con esas tres palabras ya lo dicen todo, pues pocos retratos más certeros se han hecho de España que los llevados a cabo por esa pareja feliz, cinematográficamente hablando.
3. Berlanga, el coreógrafo posibilista
El tercer reportaje, qué es el que firmara Alejo Moreno, se centra en la figura de Luis García Berlanga como cineasta, o si queremos concretar más como director de cine. Porque a Berlanga le sucede un poco lo que pasó con Luis Buñuel, que nos fijamos tanto en las cosas que se cuentan en sus películas, que nos olvidamos de que quién las cuenta las cuenta muy bien.
4. Berlanga y compañía (sus actores)
Realizado por Virginia García, este reportaje trata de desentrañar cómo surgía ese milagro que aparentemente no tiene mayor esfuerzo, y qué podemos ver en sus películas, según el cual parece que ya los actores no les cueste representar. Nada más lejos de la realidad. Aquello que en las películas de Berlanga y de otros grandes cineastas parece sencillo, en realidad es fruto de un enorme trabajo y es muy complejo.
Cien horas de material de archivos
El milagro estriba en que no lo parezca. Cientos de horas de material de archivo, entrevistas antiguas y otras hechas para la ocasión, el privilegio que es para nosotros poder trabajar con las películas, y por supuesto mucho esfuerzo y pasión, darán como resultado lo que esperamos sea una estupenda semblanza poliédrica de un cineasta que consideraba que, con haber optado al Óscar por "Placido", ya era como haberlo ganado.
Un cineasta que utilizó el humor para hacer un retrato tan sombrío como costumbrista, y certero, de su país, qué encontraba las historias en la vida misma, que se definía como erotómano, pero que hacía películas muy pudorosas desde el punto de vista del erotismo, ignorándolo prácticamente en su totalidad, por más que pueda parecer que "Tamaño natural" se aproxima a esa lógica. También Luis García Berlanga se definía como anarquista y anticlerical, lo cual le hermana más aún con su coetáneo Fernando Fernán Gómez, y ya de paso con el gran Luis Buñuel.
Todos ellos burgueses por cierto también, aunque quizás en eso no les igualase Fernando Fernán Gómez. Desde Bienvenido Mr. Marshall. Plácido o El verdugo pasando por Calabuch, Los jueves milagro, Vivan los novios, las diversas nacionales, Moros y cristianos, Todos a la cárcel o La vaquilla, no hace falta ser demasiado perspicaz para darse cuenta del grandísimo retrato de país que son las películas de Luis García
Berlanga, ese español universal de quién otro español importante, pero no universal, Francisco Franco, dijo de él que era un mal español. Mal español es quien cree que quiénes miran a su país con ternura, lucidez, comprensión e ironía, y exportan al mundo esa visión, son malos españoles.