La muerte tenía un precio es uno de los clásicos del cine que nunca te cansas de ver, igual que la filmografía de Clint Eastwood. El 'hombre sin nombre' que consiguió hacerse un hueco en Hollywood, hasta llegar a lo más alto. Este nonagenario es uno de los actores más longevos del panorama internacional, todavía sigue dando guerra. No piensa retirarse, ni nosotros queremos que lo haga. Con Por un puñado de dólares logró hacer despegar su carrera y con La muerte tenía un precio la afianzó. Se rodó en 1965 y hoy, cincuenta siete años después, es una de las más recordadas. Te contamos algunas curiosidades de la película de Sergio Leone.
La segunda entrega de la Trilogía del dólar
La muerte tenía un precio es la segunda entrega de la llamada Trilogía del dólar, la prueba que necesitábamos que demuestra que hay segundas partes que merecen la pena. Se trata de una serie de tres películas grabadas en la década de los 60, dirigidas por el director italiano Sergio Leone, protagonizadas por el actor Clint Eastwood y con música del compositor Ennio Morricone, genio de la música al que despedíamos el año pasado. La primera de ellas es Por un puñado de dólares; la segunda, La muerte tenía un precio; y la tercera, El bueno, el feo y el malo.
Cartel de la película 'La muerte tenía un precio'
Una producción a tres bandas
Este spaguetti western de 1965 es una coproducción entre Italia, España y Alemania. Después del éxito de Por un puñado de dólares, Sergio Leone contó con un mayor presupuesto, aunque esta vez, el sueldo de Clint Eastwood aumentó notablemente: en total, medio millón de dólares, de los cuales, 50 000 fueron para el actor.
Un regalo para Lee van Cleef
El director tenía claro que quería a Eastwood para el papel protagonista, y el actor aceptó sin ver la película anterior, Por un puñado de dólares. Para el papel del Coronel Mortimer, Leone lo tuvo difícil. Se lo ofreció a Lee Marvin, Charles Bronson y Henri Fonda, pero lo terminó haciendo Lee van Cleef. El actor llevaba tres años sin trabajar en el cine, haciendo pequeños papeles en series y ganándose la vida como pintor, pero de paredes y techos. Este personaje, como reconocería años más tarde, le cambio la vida. Lee Van Cleef presumía de ser más rápido que Clint Eastwood: se dice que desenfundaba, apuntaba y disparaba en tan solo tres fotogramas.
Rodada entre Madrid, Almería y Roma
Sergio Leone encontró en España los paisajes perfectos para rodar sus películas y los exteriores de La muerte tenía un precio la rodó en distintos lugares, desde Almería a Madrid, dejando los interiores para los estudios Cinecittà de Roma. El diseñador de producción Carlo Simi construyó el pueblo de El Paso en el desierto de Almería, que todavía sigue en pie y es uno de los destinos turísticos de esa zona de Andalucía. El pueblo de Agua Caliente, donde Indio y su pandilla huyeron después del atraco al banco, es Los Albaricoques, un pueblo blanco en la llanura Níjar. Allí hay calles que llevan el nombre de las estrellas de la película, por ejemplo Clint Eastwood o Lee Van Cleef.
La historia del poncho de Clint Eastwood
El poncho que el actor lleva en las tres películas de la trilogía nunca se lavó y Clint Eastwood llegó a decir que estaba realmente asqueroso. Lo que sí hubo que hacer fue coserlo porque en Por un puñado de dólares, el personaje recibe varios disparos a la altura del pecho. En esta película se puede apreciar los remiendos debido a los agujeros de bala en algunas tomas, sólo que esta vez aparecen en el lado derecho. El famoso poncho que Clint Eastwood viste tiene historia. "El poncho lo compré en España. Nunca tuve un duplicado de él. En la mayoría de los rodajes todo está duplicado o triplicado en caso de que pierdas algo o se estropee. Pero de aquel poncho nunca tuve duplicado", contaba el propio actor en una entrevista. Ahora la prenda está colgada en la pared de un restaurante mexicano que un amigo suyo tiene en Carmel.
El poncho de Clint Eastwood en 'La muerte tenía un precio'
Ennio Morricone y el silbido de Kurt 'Curro' Savoy
Ennio Morricone puso la banda sonora al western, una de las más populares de toda su carrera. Entre los temas que suenan destaca la inconfundible melodía interpretada en forma de silbido, que tantas y tantas veces hemos tarareado. Fue el músico español Kurt 'Curro' Savoy quien bajo las órdenes de Morricone puso música a este clásico y, sin ni siquiera saberlo, hizo historia.
La película más vista de 'Historia de nuestro cine'
La muerte tenía un precio alcanzó en 2016 récord de audiencia en el programa 'Historia de nuestro cine'. La película congregó ante el televisor a más de un millón de espectadores y registró un 8,2% de cuota de pantalla. Un total de 3 705 000 espectadores vieron en algún momento la película protagonizada por Clint Eastwood.