Nos ha dejado Antonio Gasset. Cuesta decirlo así, en modo eufemismo, para no asumir de golpe que ha fallecido una de las personas más inteligentes, cultas, causticas y "destroyers" que he conocido en mi vida. Director de Días de Cine también, a su pesar, que todo hay que decirlo, porque nunca quiso presentar nada, y de ahí ese estar con cara de palo en la pantalla diciendo aquellas perlas que en su día se convirtieron, y le convirtieron, en treding topic mucho antes de que nadie diera forma a tal término.
Yo conocí a Antonio hace muchos años, cuando yo era un pipiolo recién entrado en RTVE, allá por el año 82. Como era un loco del cine, me hice enseguida amigo de Jesús Ortiz, que a su vez era amigo de Antonio Gasset. Años más tarde. Sería Jesús Ortiz, quien, convertido en productor ejecutivo, se empeñó en que Antonio Gasset presentase Días de Cine. Él no quería, pero finalmente se dejó querer, y aquello fue una revolución en la televisión. ¿Se ha visto alguna vez a alguien con una proyección mediática tan grande desde un programa tan pequeño? Y tan maltratado por los horarios, pero que a pesar de todo cumple la próxima semana 30 años.
Coincidí por vez primera en un Festival de Cine con Antonio Gasset en San Sebastián, en 1984. No recuerdo haberme reído jamás tanto y tanto tiempo seguido. Yo era un joven bastante tímido y Gasset era todo lo contrario. Tenía eso que se decía entonces y ahora, mucho morro. Mucho desparpajo, el tipo más caustico e irónico que he conocido jamás. Debo decir que, al igual que todo eso es rigurosamente cierto, incluso a niveles que superan con creces sus perlas en las entradillas de Días de Cine, él era plenamente consciente de que hoy, hace ya un tiempo, mejor dicho, le hubieran defenestrado muchos de esos que jalean sus entradillas. El término "políticamente incorrecto" se le quedaba ciertamente pequeño, y si en la pantalla decía lo que decía, en el vis a vis aquello de la televisión le convertía casi en un santo.
Un ERE infame como fue el de RTVE hizo que alguien como él fuera prescindible. A ver qué dicen los que firmaron lo que le obligó a marcharse. Le vimos, discreto, en las películas de sus amigos 1, 2, 3 al escondite inglés, Arrebato o Gary Cooper que estas en los cielos. Poca gente sabe que era en realidad Realizador de categoría profesional en RTVE, y que aplicaba al máximo su máxima: "¡peor es trabajar!" y que fue realizador/redactor en Informe semanal antes de su etapa en Días de Cine. Yo monté muchos reportajes con él. Aún hoy me sorprendo cuando pido alguna cosa en documentación y veo en los créditos su nombre y el mio.
Hace 5 años, conseguimos que hiciera su última entrevista. Fue con nosotros, claro, con Días de Cine, y tuvo que ser en plan guerrilla, con las cámaras nuestras, las de Raúl y mia. No quería saber nada de cámaras, de reconocimiento o de volver. Hay anécdotas impagables sobre eso. En algún momento alguien muy importante de RTVE le propuso participar en un programa de bailes, y él dijo: "es que soy cojo". Poco después le ordenaban que se presentase voluntario para jubilarse.
Hace unos meses, en febrero, le llamé y le escuché, por teléfono, muy mal. Antonio me dijo que estaba bastante mal, y que fuésemos preparando "un reportaje de esos que hacéis", y le dije: "joder Antonio, no digas eso". Meses después hablé otra vez con él, en junio, y su voz era su voz, y con eso me quedo. Y con las ganas de haber hecho con él uun gag para el 30 aniversario del programa. Nunca se lo llegué a proponer, sabiendo que iba a decirme que no. Quería que hiciésemos un gag como el de McLuhan en Annie Hall, él haciendo de Gasset. Mandando callar a un fulano que, en una cola de cine, ufano, estaría diciendo alguna tontería de Días de Cine, y entonces yo, harto, le sacaría de detrás de un cartel y él le diría: “Yo soy Antonio Gasset, y usted no tiene ni idea de lo que es Días de Cine.