En nuestro país, casi cualquier comida, desayuno o cena lleva un ingrediente que es cotizado en todo el mundo. El ingrediente estrella de cualquier plato de los españoles. Estamos hablando del aceite y hoy en La Hora de La 1, nuestro cocinero Sergio Fernández nos va a hablar de los secretos, virtudes y propiedades que tiene este gran producto que, sin lugar a dudas, es todo un manjar.
Hay una gran variedad de aceites, pero el más sonado es, sin duda el aceite de oliva, sin embargo, ¿cuántos tipos hay y qué diferencias existen entre ellos? En La Hora de la 1, nos hemos ido de compras son Sergio Fernández, nuestro cocinero y nos explicaba cómo debemos elegirlos según qué tipo de plato queremos preparar y, también, cómo debemos cocinarlo. Por ese motivo, han afirmado que: "el aceite se conserva con todos sus nutrientes entre 6 y 8 meses" aunque, se puede consumir incluso más tarde y no habría ningún problema.
Aceite de oliva: virtudes y diferencias
El aceite de oliva es, sin duda la joya de la corona mediterránea, pero hay mil tipos, así que, ¿cómo podemos decidirnos por cuál utilizar? Esto es lo que debes saber a la hora de preparar cualquier tipo de comida con aceite:
1. El aceite de oliva virgen extra: este aceite está hecho con el 100% del zumo que suelta la aceituna, y se obtiene utilizando un procedimiento mecánico. Por ello, sus propiedades nutricionales están prácticamente intactas. Destaca la vitamina E y también los polifenoles, que son unos potentes antioxidantes. Además, en su composición también predominan las grasas monoinsaturadas: el ácido oleico. Por último, y el dato más importante es, que su grado de acidez no puede pasar de 0,8 grados.
2. El aceite de oliva virgen: al igual que el anterior, también tiene un 100% de zumo obtenido por procedimientos mecánicos y, predominan las grasas monoinsaturadas, de forma que sus propiedades nutricionales permanecen prácticamente intactas, sin embargo, su grado de acidez es más alto, pudiendo llegar hasta los 2 grados.
3. El aceite de oliva: Este aceite es una mezcla entre aceite de oliva refinado con aceite de oliva virgen y, por ese motivo, tiene una acidez superior a los 2 grados. Al estar mezclado pierde una gran parte de antioxidantes. El motivo es que la mezcla lleve aceite refinado a que estos se extraen de una forma “más agresiva”, utilizando fuertes temperaturas.
Por tanto, se podría decir que, teniendo estas diferencias en cuenta, el aceite de oliva virgen extra sería el más sano, sin embargo, desde el punto de vista nutricional, tanto el aceite de oliva virgen como el virgen extra sólo se diferencian por su grado de acidez, que dependerá del gusto del consumidor.
¿Por qué compramos aceite de girasol?
Muchos son los que deciden utilizar para fritos, dónde se necesita mucha cantidad de aceite, el aceite de girasol. Pero, ¿es igual de sano? Estos aceites están hechos con semillas y son ricos en ácidos poliinsaturados: es decir, que tienen ácido linoleico y también grasas cardiosaludables, pero las personas suelen elegir el aceite de oliva porque es mucho más resistente a altas temperaturas.
Este hecho es por el ácido oleico, ya que resiste altas temperaturas de hasta 170º y, por ello, muchos aceites de girasol cada vez cuentan con una etiqueta de “alto oleico” para así, asemejarlo más al aceite de oliva. Aun así, nuestra recomendación es, que, si tienes que elegir entre uno y otro, aunque el aceite de girasol sea más barato, que escojas el de oliva virgen. Eso sí, si al final vas a freír hay que: evitar el punto de humo, es decir, utilizar una temperatura adecuada, no reutilizar el aceite más de 3 veces, no mezclarlo con otros tipos y, sobre todo, filtrarlo siempre después de cada uso.
Los precios del aceite bajan y a los agricultores cada vez les sale más caro producirlo
Durante los últimos dos años, el precio del aceite ha variado, sobre todo en 2019, donde por 30 euros puedes conseguir 100 kilos, (los precios son en kilos porque el aceite es una fruta, la aceituna y así es como se vende). Si se incluyen los datos del año 2018, la caída de los precios es aún más inquietante, ya que sería de hasta un 30% en 2 años. Por ese motivo, el sector olivarero está en caída ya que les cuesta más producir el aceite que su venta. Según los trabajadores del sector , perderían unos “81 euros menos por cada 100 kilos de aceite”. Por ese motivo, durante los últimos años se han manifestado para que reciban ayudas para regularizar su sector.