Las UCIS de nuestro país estuvieron durante meses abarrotadas, y son miles los pacientes que, debido a su situación en los hospitales, aislados del resto del mundo, al salir se han encontrado con problemas para poder rehacer su día a día. Un trastorno del que dicen, el 44% de los enfermos que han pasado por la enfermedad en la Unidad de Cuidados Intensivos, van a necesitar ayuda psicológica.
El equipo de investigación de La Mañana, ha entrevistado a varios pacientes que pasaron por la UCI. José Carlos entró en Cuidados Intensivos debido a la gripe A, pero al despertar 50 días después en plena pandemia, enfermó de nuevo, pero esta vez de Covid19. Aunque hace más de un mes que dejó el hospital, aún le queda una larga recuperación. ‘’Tengo miedo, tengo miedo de pegárselo a mi familia, de salir y pegárselo a los demás o que se me vuelva a reproducir’’. Y además asegura que ‘’he visto la muerte, porque la he visto’’
''Hay gente que no tiene muy claro si en un tiempo va a volver a tener esa sintomatología’’
El 44% de los enfermos por coronavirus que han pasado por la UCI necesitará ayuda psicológica, según Juan Antequera, psicólogo clínico y vocal del ANPIR, ‘’ Hay gente que ha quedado con síntomas crónicos, gente que no tiene muy claro si en un tiempo va a volver a tener esa sintomatología’’ y por tanto asegura que toda esa situación de incertidumbre genera ‘’ un nivel de ansiedad que nos cuentan algunos pacientes que están secuestrados, porque sienten que no pueden salir’’ a lo que los psicólogos llaman ‘’falsos recuerdos’’, es decir un síndrome confusional ‘’ no sabes qué es real y qué no lo es’’. Una reacción que asegura ‘’es del todo normal en una situación anormal’’.
''Nunca he sentido tanto dolor en el cuerpo, como si me hubieran dado una paliza’’
Otro de los afectados fue Alberto, que a base de fuerza de voluntad y debido a su juventud, no tuvo que pasar por la UCI. Aun así, ha tenido secuelas emocionales. ‘’Nunca he sentido tanto dolor en el cuerpo, como si me hubieran dado una paliza’’. Alberto reconoce que tuvo que dejar de ver la televisión porque le ‘’afectaba mucho’’ y decidió que ‘’tenía que remontar’’.
Eduardo también sufrió de pleno la enfermedad, en su caso, estuvo durante dos semanas ingresado en la UCI y durante ese tiempo, llegó a perder 15 kilos y también la posibilidad de moverse y la compañía de su familia. ‘’ A mi pareja le dijeron que estaba muy grave y que estuviera preparada’’. Incluso, asegura que las enfermeras le dijeron que ‘’le daban por perdido’’. Además, ha afirmado que no ha recibido ningún tipo de ayuda psicológica pero que está seguro de que la va a necesitar.
Desde 2014, algunos grupos de sanitarios luchan por cambiar las UCIS y ‘’humanizarlas’’ y durante la pandemia, también han actuado. Según Gabriel Heras, médico intensivista y Director del proyecto HU-CI, ‘’ las unidades de cuidados intensivos son lugares tan exclusivos que deben tener psicólogos especializados que también lo sean’’ porque, ‘’también vemos el dolor que sienten las familias, porque no pueden acompañarles y eso es atroz’’. Por ello, su equipo montó un proyecto pionero durante esos dos meses que duró la pandemia, con la contratación de psicólogos que son ‘’expertos en situaciones de emergencia’’ porque ‘’las heridas emocionales que va a generar la pandemia van a ser brutales’’.