- PARA UNA PERSONA
- 300 g de almejas
- Para quitarla la tierra:
- Sal
- Agua fría
- Cuenco grande
- La pulpa de 1 tomate rallado
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 vaso de vino blanco
- 1 ramillete de perejil fresco
- 1 cebolla
| - En primer lugar, quitamos la tierra a las almejas. Para ello, las introducimos en un bol con agua fría y sal y le cambiamos el agua 3 veces cada 20 minutos.
- Para elaborar las almejas, en una olla (que tenga tapadera) pochamos la cebolla a fuego lento. Una vez pochada, añadimos el pimentón dulce.
- Le damos una vuelta en la sartén y, en seguida, añadimos la pulpa del tomate. Es importante no dejar mucho rato el pimentón solo porque se quema, perdiendo sabor, color y ganando amargor.
- Cocinar durante 1 minuto más el conjunto, subir el fuego y desglasar con el vino blanco.
- Cocinar todo durante unos minutos más hasta que se evapore el alcohol y añadir las almejas.
- Cubrir con la tapadera y cocinar hasta que se abran las almejas.
- Añadimos perejil freso y ¡a disfrutar!
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