La sostenibilidad del mundo rural es uno de los compromisos de Paul y Catererina, responsables de la firma Oteyza. Una pareja de artesanos del textil que elaboran sus prendas solo con lana merino española, manteniendo un férreo control de todo el proceso. Una lana de altísima calidad que procede del nuevo programa de recuperación de la cabaña lanar merina española en peligro de extinción, una acción que Paul y Caterina apoyan desde hace más de tres años.
El respeto por el oficio se extiende desde la elección de la materia prima hasta la atención en el punto de venta, haciendo especial hincapié en la costura. Su trabajo va más allá de la sastrería masculina porque sus prendas derriban obstáculos estéticos- incluso de género- para adentrarse en una vanguardia tranquila.
Oteyza salta de Madrid a Bruselas y ahora a París.
Hablamos de dos revolucionarios silenciosos, unos rebeldes elegantes que rompen tabús y esquemas manidos a golpe de tijera. Y a golpe de hilo tejen puentes con la historia y las tradiciones españolas más elegantes. “Queremos mostrar lo que es España, y la nueva identidad del hombre”, dice Paul.
“Nuestro esfuerzo se centra en recuperar prendas con peso histórico importante y traerlas al siglo XXI”, añade Caterina. Orgullosos de que sus prendas gusten a maestros como Paul Smith que estuvo en su tienda del madrileño barrio de Las Salesas y de que las lleven estrellas del cine como Joseph Fiennes o de la música como Jorge Drexler..
Un rincón de la Embajada de España en Bruselas con diseños de Oteyza
Trabajan la galerna, la alzada, la capas, la gavia… Prendas que esconden entre sus costuras el potente legado de un pasado glorioso pero han encontrado un hueco en el presente de su mano “Es un grito fuerte y profundo que sintetiza el nuevo alma masculina dotada de la fuerza del atrevimiento, la tradición y la vanguardia”, dicen.
Ahora, releyendo a su manera la historia de España, conquistan Bruselas y la embajadora española les recibe junto a sus prendas, piezas enmarcadas en lo se llama nuevo lujo, ese nicho de mercado en el que solo se admite la exclusividad autentica y sobre todo la excelencia.
Instalación de las prendas de Oteyza en Bruselas.
Su apuesta es potente en el fondo pero también en la forma, en incluso en el mensaje. “El hombre puede evolucionar hacia nuevos patrones sin perder la identidad española”, cuenta Paul, un hombre que escuda en su capa capa Zuloaga para no enfrentarse a la mediocridad que invade, como las polillas, nuestros armarios.
Sus desfiles levantan pasiones. Especialmente el que hicieron en julio de 2018 en Matadero, durante la Semana de la Moda de Madrid, la MBFW Madrid. Un espectáculo de moda y danza hecho en colaboración con el Ballet Nacional de España (BNE) para presentar su colección de primavera y verano de 2019. El vídeo es uno de los más reproducidos en redes sociales.
El arte de Oteyza y el BNE.
Paul y Caterina llevan años poniendo en valor los dictados de la sastrería y ocupan un puesto relevante en la nueva moda española. Ahora dan un paso de gigante al entrar en el calendario oficial de presentaciones que transcurre de forma paralela a los desfiles de la Semana de la Moda Masculina de París.
"Es un gran honor para nosotros”, dicen tras saber que han sido seleccionados entre un buen número de firmas de altísimo nivel. “Nos enorgullece mucho poder aportar nuestro granito de arena en elevar nuevamente la Moda Española y en este caso la moda masculina al más alto nivel".
Caterina y Paul, de Oteyza, con Esperanza Orellana y Beatriz Larrotcha, la embajadora.
Los logros profesionales se miden también con los premios y en su vitrina guardan algunos de los más importantes. Entre ellos el Premio Nacional de la Moda 2018 que concede el Ministerio de Industria. Este año, además, han sido finalistas en el concurso Who´s On Next que organiza la revista Vogue y llamaron poderosamente la atención de Jean Paul Gaultier. Pero no se relajan y ya trabajan duro preparando su asalto a París, consciente de que se mediran con los grandes. Es la capital del imperio de la moda que, quién sabe, quizá pronto tenga nuevos emperadores.