Álvaro Morata ha querido pronunciarse sobre el asalto que sufrió su vivienda el pasado viernes mientras su mujer y sus dos bebés estaban dentro. Un gran susto que tuvo lugar mientras el futbolista jugaba con la Selección Española en las Islas Feroe, a 2.400 kilómetros de distancia. “No se lo deseo a nadie, que entren con su familia en casa. Todo lo que se hayan podido llevar es secundario cuando está la salud de por medio”, ha declarado el jugador después de atender su última cita futbolística contra Suecia en el Estadio Santiago Bernabéu.
El delantero ha intentado quitarle hierro al asunto. Sin embargo, asegura que el matrimonio ya planea mejorar la seguridad del inmueble. Los ladrones se llevaron dinero en metálico, joyas, relojes y algunos recuerdos personales. A la espera de que la investigación avance, se han publicado diferentes versiones de lo ocurrido. Una de las más difundidas asegura que los asaltantes huyeron al detectar ruido en la vivienda. Otra señala que los cacos entraron armados y solo se marcharon tras conocer que llegaban la policía.
Un día antes que su marido, la modelo e influencer Alice Campello publicó en sus redes sociales unas palabras sobre lo ocurrido. “Es una de esas cosas que no olvidas fácilmente. Que hacen darte cuenta de cuánto valen el amor y la vida. Saber que tienes a tus hijos en casa y pensar que pueden tocarlos o hacerles algo es realmente inexplicable”, publicaba en su cuenta de Instagram. El ariete anotó anoche un gol que dedicó a su esposa. Un tanto que de manera simbólica puede servir para cerrar este desagradable capítulo.
Una historia que se repite
En los últimos meses otros futbolistas como Jordi Alba, Joaquín Sánchez o Karim Benzemá también han sufrido robos en sus domicilios. La exposición mediática de los jugadores, sus altos salarios y un calendario público de partidos y concentraciones les convierten en objetivo para los ladrones.