- 2 patas de pulpo cocido
- 1 berenjena
- 3+3 hojas de shiso verde y morado
- aove, sal, pimienta
- Para la salsa:
- 30 g jengibre fresco
- una c/s pasta miso
- 2 hojas shiso verde
- 100 g salsa de soja
- 100 g sake
| - La salsa. Rallar el jengibre fresco sobre un colador. Aplastar con una cuchara para extraer el jugo y reservar. Poner en un cazo al fuego la salsa de soja, el sake y el shiso verde cortado. Disolver en la salsa la pasta miso. Reducir un poco, hasta que espese. Y añadir el jugo de jengibre. Mezclar bien y apagar el fuego.
- El puré de berenjena. Freír las berenjenas a rodajas en abundante aceite suave. Escurrir bien sobre papel absorbente. Aliñar con aceite de oliva, sal y pimienta y triturar en el vaso de la batidora. Reservar en una manga pastelera.
- El pulpo. Marcar la pata de pulpo en la parrilla por ambos lados. Fuera del fuego, pintar la pata con la salsa, hasta que quede bien lacada, y dejar reposar.
- La guarnición. Freír hojas enteras de shiso verde y morado.
- Cortar la pata de pulpo en porciones grandes. Intercalar los trozos de pulpo con las hojas fritas de shiso. Decorar con unos puntos de puré de berenjena frita.
|