Los jueves los concursantes se enfrentan a la primera prueba de fuego de la semana: el pase de micros. Sólo dos días después de conocer los temas para la próxima gala, cantan frente a los profesores para ver fallos y tratar de sacar lo mejor de cada uno. ¡Y para los seguidores del canal 24 horas es cita obligada: café, merienda y OT!
La primera actuación del ensayo fue la de Cepeda y Míriam. Al dueto gallego le faltó conexión al interpretar Estoy hecho de pedacitos de ti y Manu Guix les avisó: "Si no vais juntos en este tema, no hay nada. Estáis cada uno a vuestra bola". El problema, para Noemí es que Cepeda tiene la canción muy viciada.
Alfred y Aitana estuvieron totalmente descontrolados. ¡Noooo! Esperamos mucho de este número porque son los favoritos, pero es cierto que Bajo el mismo sol no les ayuda nada a lucirse. Lo mejor de la actuación es ver a Alfred bailar. ¡¡Es amor!! Aunque Vicky, la coreógrafa de la Academia, no piensa igual. Tienen que ser más naturales y coger los pasos bien para no parecer robots y no estar "desequilibrados".
El número preferido para los fans de los musicales es el de Nerea y Ricky, que esta semana se meten en la piel de Jennifer Grey y Patrick Swayze para interpretar The time of my life, de la película Dirty Dancing. Pero...¡fue un desastre total! Manu Guix sólo pudo decir: "está de jueves".
Los que gustaron fueron Amaia y Roi con Shape of you (Ed Sheeran). Roi le ha cogido el gustillo a tocar la guitarra en directo y parece que se la subirá al escenario el próximo lunes también. Amaia le acompañaba con una maraca y Manu Guix, al piano. La música en directo es un arma de doble filo: por un lado, son ellos los que mandan y pueden lucirse; pero es fácil que se pongan nerviosos y vaya en su contra. "Habéis estados desacompasados y este es el principal problema de vuestra actuación", señalaron los profesores.
La bikina de Ana Guerra dejó frío a los profesores. Es una canción con la que la concursante quiere hacer una defensa a las mujeres que han sufrido, pero estuvo más pendiente de otros aspectos que de transmitir este sentimiento. Y los Javis se lo recriminaron.
¡La sorpresa fue Raoul! Gustó y mucho. El catalán cantó Million reasons con tanta fuerza y energía que los tutores sólo pudieron aplaudir y felicitarlo. Por primera vez en un pase de micros de jueves los profesores no pusieron ninguna pega.
Otra de las actuaciones en solitario con más fuerza es la de Agoney y su Rise like a phoenix. Pero en este caso estuvo muy flojo, sobre todo a causa de los problemas de garganta del concursante y el agotamiento vocal. Mamen Márquez, directora de técnica vocal, le recomendó no hablar. A pesar de todo, los profesores confían en que va a hacer algo espectacular en la Gala 5.
Agoney volverá a subirse al escenario el lunes para cantar Más que suerte, junto a Beatriz Luengo. El canario interpretará la parte de Jesús Navarro en la versión original del tema.
Operación Triunfo - Agoney cantará con Beatriz Luengo 'Más que suerte'
Las últimas en cantar fueron las nominadas, Mireya y Marina, que están pasando una semana especialmente dura. La sevillana se ha puesto un reto demasiado alto con una canción de Christina Aguilera, The voice within. Además de ser un tema en inglés, tiene muchos giros que se escapan de la capacidad de Marina. Ni siquiera ha conseguido controlar la canción con los arreglos que le han hecho. Manu lo tiene claro: "simplifica para poder lucirte". Tras las valoraciones, Marina se vino abajo y rompió a llorar.
A Mireya le pasa el caso contrario. ¡Es pura emoción y sencillez! Se enfrenta a la eliminación con Cuando nadie me ve, de Alejandro Sanz en la versión de Niña Pastori, un tema que le favorece y va perfectamente con su tono y personalidad. Ha conseguido lo más difícil, ahora tiene que practicar durante cuatro días para no desafinar.
Al final del pase ensayaron a coro la canción La revolución sexual, de la banda La casa azul liderada por Guille Milkiway. Y la destrozaron. Noemí les echó una bronca porque no se sabían la letra y achacó que no se toman en serio el tema grupal. Esperamos que de aquí al sábado estudien lo suficiente para, al menos, no defraudar a los profesores.