- 200 g. garbanzos.
- 200 g. bacalao.
- 600 g. espinacas.
- 2 dientes ajo.
- 1 huevo duro.
- 20 g. almendras.
- 200 g. berberechos.
- Perejil, azafrán.
- Aceite, sal.
- 20 g. pan.
| - Poner los garbanzos en remojo con agua tibia y algo de sal. Cocer partiendo de agua hirviendo también con una pizca de sal y algo de bicarbonato si deseamos que queden más tiernos, durante 2 horas en cocción tradicional o 25 minutos en olla a presión.
- Cuando resulten tiernos los garbanzos añadiremos las espinacas lavadas y troceadas, continuar la cocción 10 minutos más. Freír en una sartén los ajos, el pan y las almendras, debiendo resultar dorados ambos ingredientes.
- Majar en un mortero todos los ingredientes anteriores además de la yema de huevo y el azafrán hasta obtener una pasta homogénea y muy olorosa, añadir esta pasta al guiso y continuar con la cocción. Desmigar el bacalao desalado e introducir con el resto de ingredientes.
- Saltear los berberechos en una sartén con aceite de oliva hasta que se abran. Picar finamente la clara de huevo. Comprobar el punto de sal del potaje y servir en plato hondo decorado por encima con los berberechos, el perejil y la clara de huevo.
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