Pocas mujeres pueden presumir de ser icono de moda a los 24 años. Motivo más que suficiente para que Rihanna protagonice por segunda vez la portada de la revista Vogue, de nuevo ante el objetivo de la prestigiosa, Annie Leibovitz.
Felina y seductora, sigue dando que hablar. Sobre todo ahora, cuando nadie entiende que haya decidido retomar su relación con el rapero, Chris Brown, el mismo sobre el que se emitió una orden de alejamiento de la cantante por agresión.
La artista reconoce que su vida, en este tiempo, no ha sido fácil. Se encerró en sí misma y no ha tenido una sola cita. Lamenta que la gente juzgue sin conocer cómo ha evolucionado su amistad con Chris estos últimos meses: No están dentro. No pueden ver lo que yo veo.
Ella ha decido dejar pasar lo malo. Aunque tampoco aclara hacia dónde le conducirá este acercamiento a su ex.