"Cotejar el ADN de nuestros padres es importante porque son mayores y van falleciendo", ha asegurado en Los Desayunos de TVE, Mar Soriano, coordinadora de la Plataforma Bebés Robados.
Soriano ha explicado que su colectivo trabaja conjuntamente con una comisión del ministerio de Justicia para crear un censo de casos, partiendo de los testimonios de las familias, aunque ha aclarado que la plataforma no se reúne con la comisión desde abril "por lo complicado de nuestra organización interna".
El siguiente paso prioritario sería el cruce de los datos de ADN depositados por los familiares el Instituto Nacional de Toxicología o en centros privados donde deberán ser analizados. La plataforma también trabaja en estos momentos en la apertura de archivos con documentación sobre los diferentes casos, "para empezar por el principio. Es nuestro principal input", ha señalado Mar Soriano.
"Estamos ilusionados con el desarrollo de una enmienda europea sobre libre circulación de datos. Nos interesa poder cotejar los datos de los libros de fallecidos con las entradas de nacimientos y en eso estamos trabajando" ha detallado.
"Lo primero es la búsqueda y luego la responsabilidad penal"
A juicio de Soriano, "los casos de bebes robados" no son hechos puntuales porque se repiten a través del tiempo y eso es lo que se "debe investigar" porque hay una parte de la sociedad "que quiere encontrar la verdad y quiere cuantificar".
"Lo primero es la búsqueda y luego la responsabilidad penal", ha añadido, cuestionada por periodistas sobre la existencia de una supuesta trama en torno a los casos.
Mar Soriano ha relatado la situación particular de su familia, que busca a su hermana nacida en los años 60, y a la que dieron por muerta en la maternidad de Odonell.
"Se la llevaron a la incubadora y estaba sana (...) nos dijeron que había muerto. Mis padres se dirigieron a varios departamentos en busca de documentación pero no encontraron nada", ha recordado.