Sin escape
Pocos sabemos que el aire mata y lo tenemos que respirar 13 veces por minuto. No hay escape y cada año los tubos de escape de los coches son los culpables de 16.000 muertes.
Esta circunstancia cobra definitivo valor cuando la coincidencia de concentración humana, vehículo y clima apuntan a las ciudades como principales espacios de contaminación. El Escarabajo Verde ha estado valorando la calidad de vida, es decir de aire limpio, que se respira en las ciudades. Los índices de las recientes evaluaciones han obligado a centrar la atención de los dos núcleos urbanos con más habitantes que hay en España: Madrid y Barcelona.
En la última evaluación de la Unión Europea se advierte de que los europeos pierden un año de vida a causa de la contaminación atmosférica. Significa que a nivel europeo serían 350.000 muertes prematuras al año, que a nivel español se quedarían en 16.000. De hecho, el efecto de la contaminación atmosférica es más devastador que los accidentes de tráfico, sin mencionar que los más vulnerables son los niños por su capacidad pulmonar y por el riesgo de circular en cochecitos, a nivel de los tubos de escape.
¿Qué hacer en un escenario tan dramático? Transportes públicos, medidas para poder circular en bicicleta, impuestos mayores sobre determinados vehículos más contaminantes y una cultura nueva donde la sociedad de la opulencia deje paso a una nueva fórmula de preservar la ciudad y tener más salud.
Un documental de Rosa Masip y Paloma Rico
Imagen y sonido: Nicolás Sánchez y Juan Baño
Montaje: Ramón Rull