El consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña ha defendido la actuación de la policía en las protestas de indignados en su comunidad. Para Puig, se usó "legítimamente la fuerza, tras tres horas y media de diálogo". Y ante las protestas en el Parlamento asegura que "es falso que los Mossos d'Esquadra incitaran a la violencia, ni infiltrados, ni de paisano". Felip Puig ha intervenido en el programa de análisis político de La 1 'Los desayunos de TVE', que dirige y presenta Ana Pastor.
Felip Puig ha analizado las actuaciones policiales que se produjeron en su comunidad el 27 de mayo y a las puertas del Parlamento catalán el 15 de junio contra las protestas de cientos de indignados. Actuaciones policiales que han sido criticadas desde algunos sectores por su excesiva contundencia. Para el consejero, "todos los informes recabados constatan que la actuación fue justa y proporcional". "Las imágenes pueden dar a entender que era desproporcionada pero hubo agresiones contra la policía y boicot", ha asegurado. "Los agentes actuaron para proteger a los servicios de limpieza y a los propios policías agredidos" aunque ha reconocido que en acciones de este tipo "puede haber algún momento de exceso".
Según Puig, después de tres horas y media de diálogo, hubo que "usar legítimamente la fuerza y la policía tuvo que intervenir de forma contundente". "Se intentó evitar el uso de la fuerza pero la gente debe comprender que cuando la policía tiene una misión, debe actuar". "En todo caso hay elementos suficientes de análisis para contrastar si ha habido algún mal uso de la ejercicio de la autoridad", ha añadido.
Mossos d'Esquadra
Puig ha hablado de falsedad ante una posible infiltración de agentes a las puertas del parlamento catalán el 15 de junio, y donde 10 diputados resultaron agredidos. "Es falso que los Mossos incitaran a la violencia, ni infiltrados, ni de paisanos". Para el consejero su único objetivo era proteger el orden público" e "iban correctamente identificados".
Movimiento 15-M
Sobre la continuidad del movimiento, el político catalán cree que ante la ocupación del espacio público se "debería hacer alguna reflexión y si es necesario pedir el auxilio de la policía para ver cómo se va dando fin a esta ocupación". Puig cree que los indignados que han decidido quedarse acampados en la Plaza Cataluña no se corresponden con el sentimiento del 15-M – con esa inicial voluntad de manifestación - y que una ocupación permanente "no se debería permitir más tiempo".
Dimisión
Preguntado por una posible dimisión por la gestión de estas protestas, Puig ha asegurado que "no he pensado dimitir en ningún momento. "Las responsabilidades de origen público son frágiles y a veces la intervención despierta movilizaciones contradictorias". Aunque es consciente de que "cuando uno asume responsabilidades difíciles, uno debe estar dispuesto a poner el cargo a disposición de quien te nombra".