Los mitos y relatos de todos los pueblos del mundo narran historias de seres que son la encarnación del diablo.
Contra este y las fuerzas malignas, el hombre solo podía apelar al don divino del hombre, el lenguaje.
Los mares relatados nos habla esta semana del sentido mágico de la palabra y de cómo hablar se convierte en ocasiones en invocar, convocar, maldecir, sanar, vivificar o matar.