En julio de 2015, se creó una asociación sin ánimo de lucro plurinacional para recrear los pasos que dio Carlomagno, el primer gran emperador europeo entre el año 800 y 814.
La Vía Carlomagno empieza en Riga, en Letonia, y pasa por Alemania, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Francia y termina en España.
Este gobernante está considerado el padre de Europa, ya que entendió como nadie la necesidad de tener elementos de comunicación en común entre los pueblos, pero protegiendo y conservando la identidad regional de cada territorio.
Jean Marie Beapuy, impulsor desde Francia de este recorrido, ha dicho en Europa Abierta en Radio 5 que el proyecto nace de la voluntad de los movimientos ciudadanos europeos para incrementar las relaciones entre los países y los viajes culturales.