Nunca nadie había tenido tan pocas ganas de llegar a la mayoría de edad como ahora. Y no por falta de ganas, sino porque cumples 18 sin la parte buena: poder ir a una discoteca a darlo todo. Eso sí, en la cárcel sí que nos reciben. ¿Se sienten los menores representados en la sociedad? ¿O acaso se invisibilizan sus problemas?
Martes y jueves, a las 20h
En el programa de hoy nos acompañan el Doctor Santos Solano, Dr. en Psicología Clínica y de la Salud; Manuela Martín, activista climática; Carla Pérez (@carlaperezvas), fotógrafa, cantante y guitarrista del grupo 'MOURN' (@ohmourn); María Giráldez, abogada y mediadora especializada en Derecho de Familia; y Ángel Aranda (@a.arandaruiz), gestor cultural, miembro fundador de 'Queremos Entrar' y co-comisario de 'Powerty'.
¿Qué significa tener 18 años?
Idealizamos llegar por fin a la mayoría de edad. Pensamos que en cuanto cumplamos esa ansiada cifra, nos independizaremos, compraremos un coche y seremos libres. Pero poco hay de cierto en esta idea. La vida sigue igual que lo era antes pero con alguna que otra responsabilidad más.
"Significa contar con la plena capacidad para obrar", indica María. "Antes de esa mayoría, a ciertas edades adquieres nuevas responsabilidades y derechos". Y es verdad, con 16 puedes trabajar pero no votar; o mantener relaciones sexuales pero no conducir.
Pero ¿son los 18 la edad ideal para fijar la mayoría de edad? Nuestro doctor de confianza, el Dr. Santos responde: "Es difícil ponerle edad a un proceso, no todo el mundo alcanza una madurez cuando cumple 18. Es hacer dicotómico algo que es un proceso".
¿Vivimos en un mundo para adultos?
Hasta que no cumplas los 18 no podrás ir a un garito cualquiera para ver a tus artistas favoritos en concierto ni coger un avión solo sin el consentimiento de tus padres. ¿Se discrimina a los menores?
Ángel lo tiene muy claro: “Se protege a los menores de una manera exagerada”. Él es miembro fundador de ‘Queremos entrar’, una plataforma que defiende y trabaja por el acceso de los menores a las salas de conciertos. “Por el hecho de que se vendía alcohol en ese local, se prohibía completamente disfrutar del concierto”, cuenta.
Por su parte, Carla lo vivió desde el lado contrario. Su banda empezó a dar conciertos cuando ella era menor de edad: “Creo que es súper irónico, tienes que tocar pero luego a las doce tienes que irte de allí porque se supone que no puedes estar, es tan raro”.
Trabajar sí, votar no
Los 16. Esa compleja edad en la que puedes ir a trabajar pero en la que no puedes votar. En la que puedes mantener relaciones sexuales pero no puedes conducir un coche. ¿Tener deberes debería otorgar también tener derechos?
“Creo que la edad de votación es algo en lo que no se va a acertar nunca”, opina Manuela muy convencida. Ella misma ha conocido a “chavales de 15 años mil veces más informados” que los mayores de edad.
María coincide con Manuela: “Votar es una cuestión de educación, si nosotros educamos a los menores en un interés en la política entonces llegaremos a más generaciones y a que todos los chavales de 18 tengan ese interés en votar".