Twitter y la industria musical estremecían ante la campaña de concienciación destinada a los jóvenes que lanzó el Ayuntamiento de Murcia. “Este verano tú eliges la pulsera”, fueron las palabras escogidas. Pero una vez más no han sido las palabras, sino una imagen, la detonante de la polémica. El montaje fotográfico de dos manos: una con la pulsera de una persona hospitalizada y otra con la pulsera de una asistente a un festival, recibió tantas críticas que al final el Ayuntamiento no tuvo más remedio que retirarla y pedir perdón.
Las voces en contra de la campaña no tardaron en saltar. La mayoría aluden a que con esta imagen el organismo público parecía insinuar que si acudes a este tipo de eventos tienes todas las papeletas de contagiarte de Coronavirus. Entre ellas, la de Alberto (vocalista de Miss Cafeína), quien no dudó en manifestar su malestar.
La indignación en Twitter, sobre todo por parte de la industria musical, enseguida se hizo notar. Palabras como: “vergonzoso” y “bochornoso” inundaban los comentarios. Y no es para menos, desde el inicio de la pandemia el sector del ocio y la cultura está siendo uno de los más castigados. Las enormes pérdidas que está sufriendo la cultura no solo afectan a artistas, si también a técnicos, salas, empresas de catering, personal de limpieza, de seguridad y una larga lista de profesionales que giran en torno a la industria musical. Por ello la campaña ha sido calificada por muchos como un gran desacierto. Críticas que a priori no llevaron a la retirada de la campaña, solo a la de la impactante imagen de las pulseras.
Horas más tarde, el aluvión de respuestas en contra que estaba recibiendo la cuenta oficial del Ayuntamiento hizo su efecto: el Consistorio murciano lanzó un comunicado oficial pidiendo disculpas y retiró por completo la campaña #TúEliges.
Un flaco favor a la Cultura
Hablamos sobre la polémica con dos expertos dentro del sector: Carla Varona, Presidenta de UFi (Unión Fonográfica Independiente), asociación creada en 2003 con el objetivo de fomentar la música independiente en España, y Label Manager del sello discográfico Sin Anestesia. Y con Dj Neil, que también ha querido dejar clara su postura al respecto, reivindicando más empatía hacia un sector que atraviesa duros momentos.
P: Relacionar los ingresos hospitalarios con el sector cultural ¿qué calificativo te merece?
Carla: Muy desafortunado, me parece que no hay que criminalizar otros sectores que lo están pasando muy mal, la música tuvo una labor importantísima de acompañamiento en el confinamiento y después ha ido acatando todas las medidas de seguridad para poder continuar de alguna manera con cierta actividad, no ha habido rebrotes en ningún concierto. La cultura es segura. La cultura no es ‘ocio nocturno’.
Neil: Me parece despreciable, oportunista y sobre todo de muy mal gusto. Porque en mi caso particular llevo desde el mes de marzo sin facturar. Me han ofrecido hacer muchas fiestas y por responsabilidad no voy. Aparte de muy oportunista, me parece que quien hace ese tipo de marketing debería ser retirado del mercado, y por supuesto despedido y/o sancionado. Es mi humilde opinión.
P: Tú que conoces bien el sector, ¿qué medidas anti contagio se están tomando?
C: Todo y más. En junio fui a un concierto en IFEMA y la organización fue impecable: al aire libre, todos sentados en mesas con distancia de seguridad, entradas escalonadas por distintas zonas, geles desinfectantes, baños continuamente limpios y desinfectados, cumplimiento a rajatabla de las reducciones de aforo, todos sentados etc. Esta ha sido la tónica habitual este verano.
N: De momento el cierre es la medida anti contagio más grande que hay. Yo de las pocas actuaciones que he tenido: una fue en un restaurante donde solo entraban cinco mesas. Y otra en La Riviera, donde mi anterior fiesta precovid fueron de 2500 personas, y la última que hicimos metimos 200 personas exactamente, distribuidas en 20 mesas por toda la sala, separadas por plásticos, con las distancias de seguridad, alcohol desinfectante, mascarillas, de todo… Más medidas que las que tomamos nosotros no las ha tomado nadie. En el sector del ocio nocturno y el espectáculo yo creo que todo el mundo es muy responsable. El 95% de la gente lo ha hecho bien. Evidentemente en todos los sitios hay una oveja negra. Pero no solo en el sector del ocio sino en todos.
P: ¿En qué estaría pensando la persona que hizo el cartel?
C: No creo que hubiese mala intención ni que pensara las consecuencias de esta comparación, pero tienen que entender que el sector está muy sensibilizado, en una crisis sin precedentes y necesita el apoyo del sector público más que nunca. Además ya han rectificado, Murcia ha demostrado estar siempre muy comprometida con la música.
N: Creo que son gente primero con muy poca dosis de moralidad y después con muy poca dosis de cultura en general. Querer comparar una pulsera de un festival con una pulsera de ingreso en un hospital me parece de muy mal gusto. El nuestro es un sector que está siendo continuamente señalado con el dedo de una forma totalmente injusta y campañas así están hechas sin ninguna clase de pudor, ni de ética.
P: Al ayuntamiento le ha costado retirar la campaña y pedir perdón. ¿Por qué?
C: Imagino que la avalancha de críticas en Twitter ha tenido su efecto y se habrán dado cuenta de que era poco acertado. Rectificar es de sabios y lo agradecemos.
N: Paso de ellos. En el momento que has publicado eso, has permitido que se lance, has contratado a alguien que diseña esas cosas y has dado el visto bueno a mí me parece deleznable, denunciable y que le podríamos pedir daños y perjuicios todos. A mí entonces las excusas y disculpas del Ayuntamiento no me valen.
P: Nos podrías dar algún dato sobre las pérdidas que está sufriendo el sector.
C: El sector es creador de más de 700.000 puestos de trabajo y la aportación al PIB se sitúa en el 3,8%. Las pérdidas de ingresos de este año son del 36,5%, se calculaba antes de verano en más de mil millones de euros, esto solo del sector de manera directa. De la economía estatal en más de cinco mil millones.
N: Las pérdidas son totales porque somos un país que se dedica principalmente al ocio, al turismo, a la fiesta, a la risa… y se ha parado absolutamente todo. No solo los DJs, como yo, artistas, técnicos de sonido, productores, cámaras, gente de mil y una labores que hay que hacer en el mundo del espectáculo. Quizá los actores, los cantantes o los presentadores seamos un poco la cabeza visible pero detrás nuestro hay miles y miles de currantes y cientos de miles de familias que viven de ello en nuestro país. Y, con perdón, es una auténtica putada. Pero bueno, creo que hay que hacer de tripas corazón y tenemos que hacer caso de lo que digan nuestros gobernantes. Estemos o no de acuerdo. Seamos de derechas, de izquierdas o apolíticos. Hay que hacer caso a quienes están gobernando e intentar que esto no vuelva a pasar. Que no nos vuelvan a dejar tantos mayores. Que no vuelva a haber tantas muertes que es una desgracia total y absoluta. Y que ojalá se pongan de acuerdo todos, salga una vacuna, nos puedan vacunar y que podamos retomar poco a poco nuestra actividad. Es una situación muy complicada para todos los sectores, pero seguramente el sector turístico, el del ocio y el cultural sean los más apaleados por esta enfermedad.