menú principal Noticias

Feijóo acusa a Sánchez de "controlar Telefónica" y este le ignora y le culpa de "tapar" la gestión de Mazón

  • Feijóo culpa a Sánchez de intentar "extorsionar a los medios" y el presidente le reprocha que se abrace a la "ultraderecha"

  • El pacto migratorio del Gobierno con Junts centra el 'cara a cara' entre Sánchez y Abascal

ROCÍO GIL GRANDE
Tiempo de lectura 6 min.

El clásico enfrentamiento en el Congreso entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha estado protagonizado este miércoles por la absoluta falta de comunicación entre ambos. El presidente de los ‘populares’ ha acusado al jefe del Ejecutivo de “controlar Telefónica” con el fin de "extorsionar a los medios" de comunicación y éste se ha limitado a defender el aumento del gasto en defensa, sin hacer ni una mínima referencia a la acusación de Feijóo pese a las insistencias del líder del PP. Después, Sánchez ha aprovechado para acusar a Feijóo de "tapar" la "negligencia" del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, "abrazándose" a la ultraderecha.

La pregunta que había registrado Feijóo para la sesión de control al gobierno era la siguiente: “¿Va a ofrecer la información que le demandan los españoles?”. Una pregunta abierta que no dejaba entrever el grueso de su intervención. Tras formularla, el líder ‘popular’ ha pasado al ataque refiriéndose a las informaciones publicadas en varios medios relativas a que el ministro de Transformación Digital, Óscar López, se habría reunido en París el mes pasado con el presidente de Telefónica y con el presidente de Vivendi, Arnaud de Puyfontaine, que tiene participación en el Grupo Prisa.

Sánchez: "Usted elude el cese de Mazón abrazando a la ultraderecha"

La respuesta del jefe del Ejecutivo a toda la intervención de Feijóo no ha contado con una sola referencia a las acusaciones de éste, que ha ignorado por completo. Fuentes del Gobierno han calificado de "absurda" la acusación del líder del PP. Aseguran que, a pesar de lo que dice Feijóo, La Moncloa "no tiene ninguna responsabilidad sobre Prisa" y consideraron "una falta de respeto monumental" la intervención del jefe de la oposición.

El presidente Sánchez ha aprovechado su intervención para acusar al líder del PP de "tapar" la "negligencia" de Mazón en la gestión de la dana "cometiendo uno más grave": "Usted elude el cese del señor Mazón abrazando a la ultraderecha". Se ha referido así al pacto presupuestario de la Generalitat con Vox, en el que el PP valenciano asume los postulados del partido de Santiago Abascal en materia migratoria, de Pacto Verde Europeo y de memoria histíorica.

Sánchez ha incidido en que Feijóo "tapa" a Mazón después de que legase a la Presidencia del PP en 2022 para "tapar la corrupción" de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso. "Lamentable", ha proclamado.

El principio de su intervención, sin embargo, ha ido centrada a presumir del aumento de la inversión en defensa que ha ido haciendo su gobierno desde que llegó a La Moncloa, y ha destacado que España ahora está más cerca de cumplir con el 2% del PIB que comprometió su predecesor en el cargo, Mariano Rajoy, en 2014. De hecho, ha asegurado que el gasto presupuestario en defensa en el año 2028, cuando Sánchez se convirtió en presidente, estaba "a años luz" de alcanzar ese compromiso.

Feijóo: "Lleva semanas dedicado a la guerra de Prisa"

En concreto, Feijóo ha acusado a Sánchez de gastar "2.000 millones de euros de los impuestos de todos los españoles en controlar Telefónica". "Y parece ser que la usa para extorsionar a los medios de comunicación", ha dicho en referencia a El País, perteneciente al Grupo Prisa. "Ahora, con el contexto internacional más complicado en décadas, lleva semanas dedicado más tiempo a la guerra de Prisa que a la guerra de Ucrania", ha afirmado.

El presidente de los 'populares' ha exigido a continuación a Sánchez que no le haga "un daño irreparable" a la empresa de telecomunicaciones, que "no juegue con una empresa estratégica" y una "multinacional española".

Precisamente, el Grupo Popular en el Congreso ha solicitado la comparecencia del ministro López y del presidente de Telefónica, Marc Murtra, para informar de la reunión que mantuvieron en febrero.

Sánchez, a Abascal: “El peligro no es la inmigración, es la ultraderecha”

En su línea, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha atacado a Sánchez con la inmigración y ha criticado el reparto de migrantes, mientras que éste le ha respondido que la inmigración no es la “verdadera amenaza” que acecha a Europa y España, sino “la internacional derechista”, cuya "sucursal" es Vox.

Abascal carga contra el reparto de migrantes y Sánchez afirma que la "verdadera amenaza" es "la internacional ultraderechista"

Sánchez ha reprochado al líder de Vox “el odio que destila” contra los migrantes que viven en España y “contribuyen al crecimiento económico”, en contraste con su “admiración por los oligarcas que trabajan desde fuera para destruir Europa y contra los intereses de España". Dicho esto, ha asegurado que las principales amenazas a la sociedad y la convivencia en España y Europa no son la inmigración, sino “los aranceles al campo y a la industria”, y le ha reprochado que “calle” ante estas cuestiones con su respaldo al presidente estadounidense, Donald Trump.

También, le ha echado en cara que ponga una “alfombra roja” al magnate Elon Musk y a quienes “expanden el odio en las redes”, como el gobierno de Viktor Orban en Hungría, y que “banalice y niegue” la violencia machista.

Y para concluir, ha cargado contra los “gobiernos negacionistas” del cambio climático, en referencia una vez más al de Mazón: “Son gobiernos que niegan la evidencia científica, el asesoramiento técnico y amplifican el drama de catástrofes de emergencias climáticas".  

Antes de Sánchez, Abascal le ha echado en cara el pacto con sus “socios chantajistas” para proceder al reparto de menores migrantes en todos los territorios “salvo Cataluña y País Vasco”. “Qué vergüenza”, ha dicho. Y es que el Gobierno no ha aclarado aún cuántos menores acogerá cada comunidad, si bien Junts, con quien han pactado la reforma de la ley de extranjería, asegura que a Cataluña irán entre 20 y 30 de los más de 4.000 que se encuentran en España. 

A su juicio, lo que hay que hacer es “devolver a los niños con sus padres, en vez de tenerlos aquí hacinados y manteniendo un secuestro institucionalizado de menores”. Y ha aprovechado para lanzar reproches al PP por dar su “visto bueno” a la distribución de los migrantes, motivo por el que, ha recordado, Vox rompió los gobiernos de coalición autonómicos con el Partido Popular.

En general, ha criticado un modelo migratorio que, a su juicio, hace que se multiplique la llegada de migrantes dándoles "ayudas" mientras los españoles “no pueden acceder a una vivienda”. Y se ha referido a los disturbios de la semana en Salt (Girona) tras el desahucio de un imán, en el que los inmigrantes, según él, aplaudían a Sánchez: “Ese modelo es la Sharia, la ley islámica (...) Usted está dispuesto a la islamización de España con tal de que le aplaudan”.

La última pregunta para Pedro Sánchez ha llegado de la mano del portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que ha reprochado al jefe del Ejecutivo que Rodalies sea un "infierno" para los catalanes, que pierden "horas" en este medio de transporte, a lo que Sánchez ha admitido que existen "dificultades" y ha destacado que se ha aumentado la inversión.