Los líderes de las comunidades grecochipriota y turcochipriota han acordado este martes la apertura de cuatro nuevos puntos de cruce para unir las dos partes de la dividida isla de Chipre y emprender un proceso de desminado, según el secretario general de la ONU, António Guterres.
El presidente grecochipriota, Nikos Jristodulidis, y el líder turcochipriota, Ersin Tatar, han participado este lunes y martes en reuniones en Ginebra, Suiza, después de que Guterres les convocara. Ambos líderes han acudido deseoso de reactivar el diálogo, estancado desde hace varios años. "Las dos partes han mostrado una clara voluntad de hacer progresos y continuar el diálogo", ha asegurado el jefe de la ONU en breves declaraciones a la prensa.
Intento de reavivar la confianza mutua
Guterres ha anunciado con satisfacción una serie de medidas acordadas por ambos políticos con el objetivo de reavivar la confianza mutua, entre las que figuran trabajos de restauración de cementerios y la puesta en marcha de instalaciones de energía solar en la zona desmilitarizada. Además, se ha acordado la creación de un comité de juventudes con participantes de ambas partes y de otro comité dedicado a cuestiones de cambio climático.
Aunque este encuentro no fue convocado bajo la etiqueta de "negociaciones", sino de "conversaciones informales", su celebración era importante: las últimas negociaciones formales auspiciadas por la ONU se remontan a 2017 y terminaron en un claro fracaso.
"Desde ese entonces no se han visto progresos reales en ningún aspecto", ha recalcado Guterres, por lo que ha considerado que las medidas anunciadas hoy pueden asumirse como "progresos significativos".
Durante la reunión se ha aceptado que Guterres nombre a un nuevo enviado especial de la ONU para la cuestión chipriota, que "estará encargado de preparar los próximos pasos" en este proceso, en particular la próxima reunión de los líderes de la isla, prevista para el próximo julio.
Los ministros de Asuntos Exteriores de Turquía, Hakan Fidan; y Grecia, George Gerapetritis; y el ministro de Estado británico para Europa, América del Norte y Territorios de Ultramar, Stephen Doughty, han estado presentes en las conversaciones de Ginebra, como representantes de las potencias garantes.
Propuestas turcochipriotas rechazadas
Tras el encuentro, Tatar ha confirmado en una rueda de prensa los avances conseguidos, pero ha lamentado que algunas de sus propuestas en la reunión, como la de formar un Consejo de Cooperación de Chipre con el fin de trabajar conjuntamente en sectores como el comercial, el económico o el turístico, hayan sido rechazadas por los grecochipriotas.
Según ha admitido, la delegación liderada por Jristodulidis no ha querido considerar la formación de ese consejo al considerar que supondría reconocer la soberanía turcochipriota. "Obviamente, mi respuesta es que ya tenemos soberanía (...) con instituciones democráticas, elecciones, Gobierno, Estado de derecho y todas las instituciones de una sociedad moderna", ha afirmado Tatar.
El líder turcochipriota también ha lamentado que los grecochipriotas hayan rechazado discutir "por ahora" su propuesta de conectar el norte y el sur de la isla de Chipre a la red energética de Turquía, algo que, ha asegurado, "podría conseguirse en tres meses" y resolvería muchos problemas energéticos y medioambientales de la isla mediterránea. "Tanto en el norte como en el sur generamos la electricidad a través de fueloil, algo desastroso y peligroso para la salud y el medio ambiente", ha argumentado.
Posición grecochipriota
Por su parte, Jristodulidis ha destacado que este martes se dio un primer paso positivo hacia la reanudación de las negociaciones, aunque ha reconocido que "el gran esfuerzo comienza este martes".
El nombramiento por parte de la ONU de un enviado personal "abordará precisamente la cuestión clave, que es la reanudación de las negociaciones sobre la base del marco acordado", ha afirmado el presidente grecochipriota, que ha considerado una "cuestión importante" que se haya decidido una nueva reunión a finales de julio "para evaluar el progreso logrado desde ahora hasta entonces".
Jristodulidis también ha mencionado la carta enviada por la UE a Guterres, que "define sin permitir ninguna interpretación diferente la posición de la Unión Europea respecto a la solución del problema chipriota", algo que según él "afecta a las relaciones entre la Unión Europea y las aspiraciones de Ankara" para entrar en ella.
El año pasado se cumplieron 50 años desde que, tras invadir la isla, Turquía estableciera una administración temporal turcochipriota, que dio paso algunos años después a la declaración del Estado Federado Turco, que a la vez es únicamente reconocido por Turquía desde 1983. La parte grecochipriota insiste públicamente en que la solución tiene que basarse en el modelo federal bizonal y bicomunal para cerrar el conflicto, aunque reconoce la dificultad de esa tarea.