Nuevo avance contra el cáncer gracias a un dispositivo capaz de replicar tumores y comprobar la efectividad de los tratamientos de inmunoterapia. La tecnología, denominada MIRO (Micro Immune Response On chip, por sus siglas en inglés), analiza el funcionamiento de diferentes terapias, la aparición de posibles resistencias e identifica nuevos biomarcadores de manera individualizada.
La herramienta, ahora en proceso de patente, ha sido desarrollada por un equipo de profesionales liderado por el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC) y el Instituto de Investigación del Hospital de Mar, y se quiere transferir a la industria farmacéutica y hospitales para que se pueda aplicar cuanto antes mejor.
Esta innovación permite replicar los tumores y su entorno, para conocer su respuesta a los tratamientos y que ya ha sido probado "con éxito" en algunas pacientes con cáncer de mama, han destacado estas instituciones médicas en un comunicado conjunto.

Laura Comerma, Anna Sallent, Alexandre Calon, Alba Recort, Jenniffer Linares y Joan Albanell, investigadores del Instituto de Investigación del Hospital del Mar.
Actualmente, aun con el potencial curativo de los tratamientos basados en la inmunoterapia, solo funciona en el 20-40% de los pacientes, explica la doctora Anna Labernadie, quién diseñó el sistema durante su investigación postdoctoral en el IBEC y actualmente lidera el laboratorio de Comportamiento Celular y Bioingeniería de tejidos en el Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) en Valencia.
Esta innovación, publicada en la revista Nature Communications, podría ser "clave" para desarrollar nuevos tratamientos y determinar cuál es la terapia más adecuada para cada paciente de manera personalizada, han explicado los autores.
Muestras de cáncer de mama, pulmón y colon
Muchos dispositivos hasta ahora ofrecen resultados prometedores en el laboratorio, in vitro y en modelos de ratones, pero no funcionan tan bien cuando se trasladan a los humanos. En cambio, la tecnología MIRO ha sido probada, con éxito, con mujeres con cáncer de mama. En concreto, con muestras HER2-positivas, unas células que se caracterizan por tener niveles muy altos de la proteína HER2, la cual favorece el rápido crecimiento del cáncer.
Son especialmente relevantes para el estudio, ya que tienen un comportamiento muy definido y responden a terapias dirigidas específicamente a esta proteína. Por lo tanto, permiten evaluar el comportamiento de las células con precisión y descubrir los tratamientos que pueden funcionar.
Al rastrear células inmunitarias, se ha visto cómo pierden movimiento y velocidad al acercarse al tumor, lo que hace que el tratamiento no funcione. "Se encuentran una barrera formada por el entorno tumoral y quedan bloqueadas", asegura el Dr. Alexandre Calon, responsable del Laboratorio de Investigación Traslacional en microambiente tumoral del IMIM.
También se ha usado en otros tipos de tumor sólidos, como por ejemplo de pulmón o colon, gracias al hecho que está fabricado con técnicas microfluídicas que permiten manipular fluidos y células en una escala muy pequeña. Además, MIRO incluye cultivos de células de diferentes tipos, separados en compartimentos para dirigir y observar su evolución.
"Nuestro objetivo es transferir esta tecnología a la industria farmacéutica y hospitales para poder aplicarla a pacientes", ha añadido Labernadie.