Valencia se recupera poco a poco de una de las peores catástrofes naturales de su historia. Vecinos afectados y autoridades hacen balance de una destructiva DANA que azotó buena parte de la provincia a lo largo del martes, que deja más de 200 muertos y decenas de miles de afectados.
El debate se centra en si se podría haber evitado este trágico balance: cuándo llegaron los avisos meteorológicos, cuándo lo hicieron las alertas de Protección Civil y qué se podría haber hecho desde las autoridades para advertir a la población, que en lo peor del desastre seguía haciendo vida normal, en sus trabajos o en centros comerciales del sur de Valencia, zona cero de la catástrofe.
Varios expertos y meteorólogos consultados, así como muchos afectados, coinciden en que la alerta a los móviles llegó "tarde", a las 20:14, cuando miles de personas ya estaban atrapadas en sus coches y muchos municipios estaban completamente inundados. "Ya teníamos el agua al cuello", asegura Andrés Gómez, meteorólogo de TVE desplazado en ese momento en l'Alcúdia, al sur de Valencia. La AEMET había activado los avisos rojos, el máximo nivel, y por el que se pide evitar desplazamientos, a primera hora de la mañana.
"La gente no debería morir por este tipo de fenómenos meteorológicos previstos en países que disponen de los recursos necesarios para hacerlo mejor", señala para Science Media Centre Liz Stephens, catedrática de Riesgos Climáticos y Resiliencia de la Universidad de Reading. "Aunque se emitió un aviso meteorológico rojo para la región con tiempo suficiente para que la gente se alejara del peligro, un aviso rojo por sí solo no comunica cuál será el impacto y qué debe hacer la gente", alerta.
Repasamos la sucesión de hechos desde las primeras advertencias hasta el trágico final para decenas de personas.